miércoles, junio 06, 2018

Cuarta Ceremonia De Ayahuasca (1/3)


Esta vez cayó en viernes, así que tuve que salir una hora antes de clase para poder asistir, el Chamán me vino a recoger a la puerta del colegio y nos dirigimos directamente para el lugar en el retiro en medio del bosque dónde está su casa cerca del pantano de Sau. Tenía muchas ganas de esta ceremonia por varios motivos, primera se cumplían ya cuatro meses desde la última que se celebró y si intentáis buscarla por aquí no la vais a encontrar porque no se escribió al final, porque pasaron muchas cosas privadas y no quería influirlos. Otro motivo era que después de estas Ayahuascas que he tenido desde la primera, regresaban la parejita que estuvo en la primera ceremonia que son de Barcelona, al mismo tiempo que también venía otra parejita dónde la mujer era Argentina y el chico de Barcelona pero ambos viven en Islandia, y el último motivo era porque esta ceremonia es la única que voy a celebrar antes de la misión 2018 y el Maestro Hilaríon el día que cumplí 25 años hace dos meses atrás, me dijo “Tendrás una Ayahuasca para contactar con nosotros antes del viaje y así te contaremos más sobre tú camino que estás siguiendo”. 

Siempre me ha tocado esperar a que todos llegaran, pero esta vez fui yo la última en llegar, se adelantó un día porque nuestros alumnos de ceremonia tenían que viajar a otro lugar el día siguiente así que se adelantó, eso me complicó un poco la situación pero se pudo solucionar sin problema. Me gustó lo que ocurrió cuando llegué, al estar ya todos, pues parecía que me estaban esperando o eso fue mi sensación cuando fui a saludarlos y ya de una me hicieron mil preguntas sobre metafísica, sobre espiritualidad como si fuera allí una Maestra como los Maestros ascendidos e incluso la parejita de Barcelona que son viejos amigos nuestros del Chaman y mío, me gustó que hicieran publicidad de este blog porque ellos son seguidores y lectores, así que no se preocupen que quizás algún día nos conozcamos en persona ¿qué les parece? Sobre todo los lectores italianos que son los que últimamente leen más publicaciones desde los últimos seis meses e incluso más tiempo. 

Que me hagan preguntas y que yo tenga el privilegio de ayudarles a encontrar la respuesta es para mí una felicidad enorme, ya que eso significa que estoy ejerciendo un buen trabajo interior que refleja lo exterior para convertirme en Maestra Ascendida algún día. No era la primera vez ni será la última, un ejemplo sería en clase tengo un grupito de compañeros que están interesados en el tema y cuando tienen preguntas, me las hacen sin problema y yo les ayudo a encontrar sus propias respuestas ya que es lo que hace un guía o un Maestro, guiar y orientar. 

A las diez de la noche empezamos la ceremonia, éramos solo seis esta vez, cuando el Chaman empezó a dar las dosis solo tomaron tres personas, recuerden que YO NO TOMO, así que todo lo que van a leer aquí es puramente meditación semi-profunda, lo digo así porque lo que van a leer a continuación son experiencias pero que no son como las demás, normalmente a las demás que estáis más acostumbrados últimamente ocurren porque cambio de dimensión físicamente, en las ceremonias ocurren las mismas experiencias del mismo tipo pero sin cambiar de dimensión.

Mientras que el Chaman ya daba las tomas, también aproveché para rezarle a Dios…

Querido Dios de mi corazón y de nuestra salvación,

No permitas que nadie que no deba estar aquí esta noche nos interrumpa ni nos enrede, solo permite que la luz nos proteja y que lleguen todos aquellos hermanos y hermanas de la 5D y 4D llamados seres de luz, para que nos acompañen y nos ayuden a superar todas las trabas que ocurran a lo largo de esta noche. Invitamos a todos aquellos seres de luz, que necesitan venir y atender nuestra alma, quienes les resuenen físicamente y quienes necesiten su aliento, siempre con amor, fe, esperanza, sabiduría y mucho amor.

Que se haga tú voluntad, ¡amén!

En ese momento el chamán apagó las luces y a mí me vino repentinamente muchas ganas de llorar, me puse muy triste y cómo no quería que nadie supiera que estaba así, me tapé con la manta en la cabeza y seguí llorando. El Arcángel Uriel, mi guardián, fue el primer ser de luz de 4D que pude ver casi en su totalidad, al verme así, primero se acercó y se puso de rodillas en el suelo mientras con una de sus manos me secaba las lágrimas de los ojos y me preguntaba “¿Por qué lloras mi amor?” no le contesté, no me salían las palabras, tenía una angustia en el pecho que no podía hacer nada, solo me tapé con la manta y él que estaba pendiente de mí, me dijo “¡Déjame un sitio!” pero yo ni me moví, tampoco podía, entonces él encontró un hueco lo suficiente para poderse sentar y se puso la manta igual que yo, quedándonos tan cerca que nuestras narices se rozaban, sus ojos verdes hermosos me penetraban la mirada triste, con el dedo índice y el pulgar me agarró de la barbilla y me alzó un poco la barbilla hacia él y me dijo “¿Qué te pasa? ¿Por qué te has puesto así de repente? ¡Estamos empezando muy bien, mi amor!”. 

Respiré profundamente y le dije “No entiendo ¿por qué? Es simplemente eso” Uriel me miró a los ojos y entendí que no me había entendido y dijo “¿Por qué? ¿Qué?” y yo le dije “¿Por qué Orange lo ha hecho de tal horrible manera? Sin decírmelo claro, sin pedirme ni siquiera que yo le acompañase en su momento, sin contar conmigo…” Uriel en ese momento me comprendió y por eso empecé a confesarme, realmente lo necesitaba, no podía empezar la ceremonia con ese bloqueo, porque eso me provocaría problemas a la hora de conectar y a pesar que era muy justo, todavía tenía tiempo para liquidar una cosita pendiente que tenía. No entendía en ese momento porque Orange ha ascendido de tal forma tan horrible, yo que me enteré gracias al Maestro Jesús, fue bastante horrible enterarse por otros y no por él, y por eso me sentía más que triste o abandonada sin razón, me sentía indignada, si él me hubiese preguntado “¿Te gustaría acompañarme hasta el momento de la ascensión?” yo le hubiese dicho “Pues claro que quiero” e hubiera ido, hubiera hecho otros planes en fin de año y le hubiese acompañado en su gran momento. También supe que en su ascensión estuvo su familia y un amigo suyo que le acompañó, de todos modos algún día sabré todas estas respuestas, así que me calmé cuando Uriel me dio un beso en la mejilla y pudimos continuar con la ceremonia.

Me quise destapar con la manta que me había enroscado como un canelón, pero automáticamente caí redonda en estado de meditación semi-profunda, noté como una mano venía hacia a mi y me arrancaba de ese estado y me metía directamente perdido entre las estrellas, en el espacio exterior, justamente delante tenía la preciosa y adorable GAIA, nuestra querida Tierra, que seguía su trabajo de mantenernos vivos como de costumbre. Esa sensación de flotar era la misma sensación que se siente al tener paz en el corazón y en el espíritu, era tan encantadora que no quería salirme de ese estado, hasta que vi hacia mi izquierda como las estrellas en vez de ser puntos en el espacio se transformaban como legañas, entonces un estruendo se emanó a mi corazón y la mano o la sensación de ella la volví a tener para irme de pleno hacia el espacio exterior sin saber ¿dónde?

Caí a cuatro patas encima de una tierra rojiza que se ponía por todas partes, mis pies desnudos y mis manos quedaban lleno de tierra, intenté recuperar el aliento, pero hacía mucha calor, era de día y el Sol pegaba muy, pero que muy fuerte, entonces escuché el andar de unos pies semi-desnudos en unas sandalias muy antiguas que llegaban hacia mi cabeza y escuché “Laia”. Miré hacia arriba, pero el Sol no me permitía ver quién era, pero su voz era muy conocida, él se balanceó un poco y pudo tapar el sol que venía en contra de mí y allí lo vi y no creí que fuera él, delante de mi estaba el Maestro Jesús.
Me incorporé tan rápido como pude, pero el Maestro Jesús se agachó y me ofreció sus manos mediando tu sonrisa más hermosa, le acepté y le toqué sus manos, por primera vez noté que no estaban agujereadas, cuando ya me alcé de nuevo, le miré las manos, pero él no dijo nada, simplemente se quedó observándome con la misma sonrisa y esos ojos verdes hermosos que gritaban amor por los siete costados. Fue entonces cuando vi que su pelo era un poco más largo de lo que estoy acostumbrada a verlo y la barba era más larga, pero era él, le di un abrazo que él empezó a reír, entonces vi dónde nos encontrábamos, en medio de la nada, en un desierto. Fue en ese momento cuando comprendí todo, no tenía las manos agujeradas, tampoco tenía el peinado que siempre ha tenido desde su ascensión y estábamos en un desierto, le miré a los ojos y le dije “¿Qué haces en un desierto?” y él dijo “Me dirijo a Galilea, para encontrarme con mis discípulos” un fuerte golpe en el pecho me dejó con la boca abierta y pensé “Es el comienzo, es cuando deja el desierto y empieza toda su pasión hasta que es crucificado” él creo que me escuchó, pero hizo como si no hubiese escuchado nada. 


¿Sabes quién soy?” le pregunté y él me miró me acarició el pelo y dijo “la vieja imagen del tiempo en cuerpo y alma” me quedé sin palabras, no las comprendí ni tampoco ahora pero me quedé mirándolo hasta que él me dijo “las gotas de polvo que mi padre crea a partir de la no-vida y las convierte en vida, de los granos de arena que se compone cada parte de este camino, y de cada alma, yace el aliento de la vieja imagen del tiempo en cuerpo y alma. Es su manifestación en su máximo esplendor, solo en luz”. Hablaba de la representación del tiempo en sí y de todas las cosas que Dios creó entorno al tiempo, me sorprendió bastante pero le escuché y continuó “La imagen del tiempo se repite en cada cierto modo, en cada tiempo imaginado y no imaginado, en cada segundo en que la arena es apartada del camino por el viento, solo las gruesas serán los que permanezcan como peones de algo que será glorioso”. 

No sabía que me veía como un ángel o algo así, pero lo que decía tenía sentido, todos formamos parte de un TODO y ese TODO es DIOS EN AMOR. Entonces dijo “Cada granito grueso optará a crecer y formar parte del camino, hasta que la gloria sea su nuevo hogar y la escarcha un recuerdo de su sombra que pasaba por el camino, para obtener la ASCENSIÓN”. Mi cuerpo se paralizó cuando escuché la palabra ASCENCIÓN, no lo podía creer que estuviera hablando justamente de eso, me estaba explicando que solo aquellos que sigan el camino de Cristo, que los lleva a Dios, alcanzaran la ILUMINACIÓN, es decir, ascenderán. Igual que Orange… Wow… quise darle otro abrazo pero de repente la mano volvió y me arrancó de vuelta en el espacio-tiempo.


Abrí los ojos y me encontraba de nuevo tumbada en el sofá del lugar de la ceremonia, aún nadie se había puesto a cantar, todos seguían en sus estados de meditación, pero noté que no estaba tapada y no lo entendía si me había tapado como un canelón porque estaba de nuevo destapada, miré bien y resulta que tenía otra manta puesta un poco por encima, miré a los pies, aunque todo estaba oscuro, pude ver la silueta de Uriel que me estaba terminando de abrigar bien los pies. Uriel levantó los dos pies y por debajo pasó la manta para quedar como una momia, me giré hacia él dándose cuenta de que había regresado y dejó eso para venirme a saludar “¿Estás mejor, mi amor? ¡Te has quedado como traspuesta!” y yo le dije “Sí estoy bien, pero no estaba traspuesta, acabo de regresar” él se le mostró una bella sonrisa en la cara y me dio un beso en la frente mientras que miraba a los compañeros, pero qué curioso no había nadie en la sala… “¿Dónde están?” y Uriel dijo “A fuera, hace una noche maravillosa”.

Todo el trabajo que había hecho Uriel para abrigarme lo desarmé porque quería ir a fuera con los demás, le di la mano a Uriel para que me guiara hacia a fuera y él aceptó sin más, me agarró de las manos y me guiaba mientras mantenía cuidado de no tropezar con las maracas, o cualquier cosa que siempre hay en el suelo. No me di cuenta de que iba con los pies totalmente desnudos hasta que llegué a fuera en el jardín y los vi a todos fascinados mirando el firmamento de estrellas, me puse las gafas y el cielo estaba espectacular, parecía algo inusual, todo el mes con lluvias y niebla y con mucho frío y ese momento parecía un día cualquiera de Julio, que hacía mucha calor y que además se podían ver las estrellas muy bonitas y muchísimas estrellas. Wow.

PD. La segunda parte en 24h.

Recomendación: Time - Inception.

HR.

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domingo, junio 03, 2018

El Cuento Del Maestro


Tras 24h después de haber ido a Port Aventura y habérmelo pasado genial, y haber tenido un domingo de relax, me dispuse a cambiar de dimensión para volver a tener una experiencia o un viaje a la 5D. Echaba de menos a mis hermanos y como siempre los domingos son días muy propicios para tener un viaje de estas dimensiones. Así que me relajé al cerrar la luz, luego cerré los ojos y empecé a ver la esencia de mi alma, luego enviar un mensaje a mi corazón que se pensase que estamos en la 4D, ese mensaje el corazón lo envió a la sangre, y tras recorrer esa información por todas las células del cuerpo, las células empezaron a vibrar más alto, entonces repetí el proceso con la 5D tras los primeros mareos comunes, entonces llegó el silencio admirador.

No tenía ni idea de dónde iría a parar ni con quién me iba a ver, pero de repente tuve una sensación de que era alguien del rayo azul, así que me fui a perseguir ese rayo tan bonito dónde me llevaba. Cuando abrí el tercer ojo, la sorpresa fue que me seguía encontrando tumbada en mi cama, pero estaba en el hotel Flor de Lys, en la habitación había sentado en la silla del escritorio el Arcángel Uriel que estaba reposando sus ojos, se le ve tan poco tiempo así, lo que no entendí fue porque estaba allí y no en la cama tumbada, pero enseguida recordé que no lo había invitado o sea que era culpa mía. Me morí yo solita de la risa… decidí mejor no despertarle, sobre todo porque en ese momento entró por la puerta normal que venía de la terraza de la puerta del pasillo el Maestro El Morya.

No sé qué pasa últimamente, pero en las últimas veces que nos hemos encontrado, Uriel siempre duerme” dijo Morya yo me partí de la risa y él también lo hizo, en ese momento vi que se acercaba a Uriel para despertarlo pero yo le dije “¡No, no le despiertes!” Morya me hizo caso y se vino para la cama y me dijo “pero si hablamos, a lo mejor se despierta, mejor vamos a otro lugar, si quieres claro…” y yo le dije “No, puedes estar tranquilo, Uriel últimamente descansa muy poco y cuando lo hace, ya puede pasar un cataclismo que él no se despierta, además, no lo ves que está tan a gustito que parece un ángel aunque ya lo es”. 

Morya se sentó en la cama y me reflejé en sus ojos azules preciosos y le pregunté “¿De qué vamos a hablar hoy?” y él dijo “Me gustaría contarte un cuento” puse los ojos como dos naranjas bien grandes, pero como me gustaba tanto la idea que no me pude negar, así que le invité a tumbarse a la cama, él se tumbó a mi derecha y yo pude apoyar la cabeza en su hombro izquierdo ya que él paso su brazo para abrazarme. Entonces con la otra mano empezó a mostrar la llama azul y dijo “Te voy a contar el cuento con imágenes que verás reflejado en mi llama ¿te parece bien?” y yo le dije “Perfecto, maestro”. Entonces Morya empezó a explicar el cuento…




Había una vez, en un planeta no muy lejos de aquí, un hombre y una mujer que vivían ambos uno en frente al otro, pero que nunca se dirigían la palabra, aunque en sus corazones resonaban de la misma forma, pero cuando se miraban a los ojos del alma, no recordaban porqué eran tan especiales sus almas, ni tampoco recordaban de dónde ya se conocían. Tanto él como ella, salían de la casa y si se encontraban, uno miraba al suelo y la otra hacía ver que no lo veía, pero cuando uno pasaba al lado del otro, el perfume que llevaba ella o el olor que hacía él, sin motivo alguno, les hacían cerrar los ojos y ver unas imágenes muy inquietantes. A veces eran espadas bien afiladas, otras veces eran besos apasionados y en ocasiones miradas tras una discusión, pero al abrir los ojos ambos se quedaban inmóviles uno frente el otro mirándose a los ojos sin entender lo que veían si era real o no, inmóviles y en silencio durante un buen rato.

Un día que hacía mucho viento, el hombre regresaba del trabajo a casa, mientras que la mujer salía de su casa y mientras que abría el buzón, la carta que tenía salió volando con la fuerza del viento, la mujer se echó a correr detrás de la carta que curiosamente le fue a parar a los pies del hombre, la mujer se agachó para agarrar la carta y el hombre hizo lo mismo y agarraron al mismo tiempo la carta, con la sorpresa de que sus dedos se rozaban entre ellos. Ambos empezaron a recordar una de tantas veces que se habían conocido, vestidos con otras ropas, hablando un idioma diferente, siendo un matrimonio viviendo en medio del campo, sentían esa pasión frenética que les unía en eternos besos y plumas caricias, dónde el corazón ardía de amor y de pasión por los enamorados que estaban. 




Al volver al presente, se miraron a los ojos llenos de pasión, llenos de amor, no eran muy conscientes de lo que había ocurrido recientemente, pero sentían ese deseo el uno por el otro. El hombre muy suavemente se inclinó hacia la mujer para besarla y sentir sus labios, mientras que la mujer se quedaba inmóvil, asustada por lo ocurrido, y también porque no entendía la situación pero también deseaba ese beso. Cuando el hombre ya estaba casi a punto de besarla, la mujer se echó para atrás y el hombre asustado y avergonzado al mismo tiempo, también lo hizo y se la quedó mirando. La mujer dio media vuelta y volvió a entrar a su casa, descuidándose la carta que estaba en la mano del hombre, que mientras veía cómo reaccionaba ella, miró la carta y leyó el nombre de la mujer, curiosamente ese nombre era el que siempre le había gustado desde que era un niño y desde ahora entendía porque, ella era el amor de sus vidas, el amor que siempre en cada una de sus vidas se ha cruzado y ha sido feliz, ninguna mujer sería igual como ella, porque ninguna era ella. 

La mujer cerró la puerta y se quedó de espaldas mientras que recuperaba el aliento y se preguntaba a sí misma “¿Por qué tiene que empezar todo de nuevo y hacer cómo si no supiéramos del otro?”. Entonces alguien llamó a la puerta con los nudillos, la mujer se giró y la sorpresa fue que era el hombre, ella con lágrimas en los ojos, abrió muy lentamente la puerta y se lo quedó mirando, él también había llorado, se puso de rodillas el hombre y le enseñó un collar muy antiguo que llevaba la letra C que curiosamente el nombre de la mujer empezaba por esa letra y le dijo “Te he soñado en mil sueños y en mil momentos de esta vida, pero jamás he pensado que estarías tan cerca de mí y yo de ti. De alguna forma siempre he sabido que eras especial para mi, Casandra. Empezamos de nuevo, pero cambiando el destino, haciéndolo nuestro y solo nuestro”. La mujer se arrodilló y le besó apasionadamente, mientras que seguían ambos recordando todas sus vidas juntos.


Esta historia me cautivó el alma de inmediato, lloraba de felicidad sin darme cuenta, enseguida entendí lo que me estaba diciendo el Maestro El Morya, estoy muy cerca de reencontrarme con el marido atlante, aunque existe una incertidumbre que me atormenta de vez en cuando la cabeza de si me reconocerá, si seré capaz de estar a su altura, si podremos seguir conociéndonos en esta vida y continuar lo que empezamos en las otras vidas y más cosas… debo de tener FE y ESPERANZA porque si los Maestros dicen que sucederá este año, es que sucederá este año, y si es así, es porque ya ha llegado el momento, solo sé que el marido Atlante por su cuenta de Instagram (que nos seguimos mutuamente), en sus últimos viajes me ha estado nombrando como era en la antigüedad e incluso se atrevió a decir el nombre que yo tenía en algunas de mis encarnaciones anteriores o sea que sí que me recuerda, pero no sé si me reconocerá, esa es la pregunta que más se me repite y si pasa será porque es importante. 

Parece una locura pero es verdad, porque con Orange me ha ocurrido, cuando lo conocí no lo reconocí y él sí, y ¿qué hizo? Pues tuvo que esperar dos años y luego siguió su camino. Parece una locura pero sucedió, después me quedé frita en los brazos del Maestro El Morya y cuando regresé a la 3D, ya no había nadie, Uriel se puso en la cama para sustituir al Maestro y continué durmiendo hasta que sonó a las doce el despertador y un nuevo día volvía a empezar.

Recomendación: París – Mark Isham.

HR.

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jueves, mayo 31, 2018

Una Charla Muy Especial En 4D


Cuando el reloj del campanario tocaban las 2 de la madrugada de un viernes, entré en mi casa con ganas de tumbarme en la cama y ponerme a meditar, regresé muy pronto de Xauxa esa noche, porque a las 6am me tenía que levantar para ir a Port Aventura, por lo tanto tenía que descansar.

Mi amor, esta noche si quieres, hay un viaje programado” me dijo Uriel, me lo quedé mirándolo en silencio hasta que le dije “Bueno, si solo es en mi habitación, de acuerdo” entonces él dijo “De acuerdo, no será en 5D”. Me puse el pijama, me tumbé en la cama, mientras que notaba como el Arcángel Uriel me acariciaba la frente, siempre lo hace cuando estoy por irme a meditar, supongo que es nuestro pequeño momento de relax antes de embarcarme en el día a día de una dimensión superior, ya que en la mayoría de viajes a la 5D él no viene y se queda en la habitación. Entonces cerré la luz, me incorporé hacia la izquierda y le dije “Cuando lo sientas, abrázame, mi amor”.

No tardé mucho en tener consciencia pero no sabía si había cambiado o no de dimensión, en ese preciso instante, noté como un brazo me agarraba pasando el brazo por el cuello e intentaba agarrarme por las piernas, pero mi corazón se asustó sin motivo y Uriel dejó inmediatamente de agarrarme, así que tuvo que esperar un par de minutos más, hasta que pude calmarme de nuevo y permitir que Uriel hiciera lo que tenía que hacer. 

Luego de esperar, Uriel me dijo “Mi amor, soy yo” su voz es magnífica, así que le dejé hacer, Uriel me agarró pasando el brazo por mi cuello y después me agarró por la parte de atrás de las rodillas y me levantó quedando aúpa en sus brazos hermosos. Pensaba que nos iríamos algún sitio, pero en ese momento había olvidado la promesa que nos habíamos dicho antes de empezar la meditación, que solo estaríamos en 4D porque no había tiempo para un viaje a la 5D. Después de recordarlo, Uriel me dejó de nuevo encima de la cama y sin entender porque ni tampoco intentar preguntar porque, me quedé a esperar, él aprovechó y me agarró las dos manos y me las puso una encima de otra encima de mi barriga (por la parte de la matriz), entonces él se fue unos segundos y yo solo podía escuchar los pasos que hacía al caminar y luego volvía hacia la cama.

Uriel aprovechó para colocar algo a mi derecha que no supe qué era, entonces agarró una de las manos que me había colocado encima de la barriga y me dirigió hacia la izquierda. Sorprendida, noté que lo que estaba tocando era un perro que estaba muy feliz de verme, se movía bastante rápido, en ese momento dije “¿Qué es esto?” y Uriel dijo “Abre los ojos y míralo por ti misma, amor”. Abrí el tercer ojo y miré, ¡no lo podía creer, era el Senhior, mi perro que el próximo mes de Agosto se celebrarán 5 años de su muerte! Entonces Uriel dijo “¡Sorpresa!”.

Me incorporé, quedándome sentada en la cama y empecé a acariciar al Senhior, él estaba muy contento y yo estaba emocionada, ¡qué maravillosa sorpresa que me hizo Uriel! Antes, pensaba que la muerte era el fin de las relaciones, que si una persona moría, no existía nada más, no había nada más y ese recuerdo solo existiría mientras que las personas que lo conocían seguían vivas, pero cuando mi tío se murió cuando yo tenía ocho años de edad y mientras que me decían que había fallecido por la enfermedad que padecía cáncer, yo vi a mí tio entrar de nuevo en ese bar dónde me encontraba junto a mi familia, él seguía vivo, a pesar de que ya no tenía un cuerpo, pero su alma seguía viva, fue entonces cuando allí empecé a creer en la vida eterna, en que el cuerpo muere pero el alma sigue vivo para todas las eternidades posibles e imposibles. Cuando se murió el Senhior, la pasé horrible, mi alma se quebró en mil pedazos y mi corazón en mil trozos, pero siempre mantuve la esperanza de que lo volvería a ver y que si seguía teniendo FE, sería sin tener que pasar yo por el paso de la muerte. El Senhior para mi no fue un simple perro sin raza, yo lo adopté porque nuestras almas conectaron enseguida, que aunque conozca a mil perros, jamás ninguna alma conectó igual como lo hizo con el Senhior, no lo entendí en el primer instante en que lo conocí, pero cuando se murió, reconocí que él era especial, que él tenía que conocerme porque él tenía que enseñarme muchas cosas sobre la vida, y así fue, queridos y así fue. 




El Senhior me enseñó a confiar, a ser leal, a tener FE y esperanza y a vivir la vida a cada segundo, para mantener ese pensamiento y esa esperanza siempre en positivo. Por eso para mí el Senhior no fue un simple perro, para mí fue como un hijo, un hermano e incluso un sabio, dónde no usaba palabras para enseñarte, pero sus actos ya te enseñaban sus sabidurías. Lo adopté cuando él tenía 3 años, y nos dejó cuando él cumplió 18 años y dos meses y nunca dejé de amarlo, nunca, incluso ahora lo amo, y el próximo 2 de Junio cumplirá 23 añitos, que aunque ya no tenga el cuerpo físico, sigue estando vivo y sigue celebrando su cumpleaños, hasta que decida encarnar de nuevo en otro cuerpo, otra vida y otro aspecto, pero de momento me vigila desde Nosso Lar y de vez en cuando baja con la supervisión de Uriel y puedo pasar unos minutos con él.

Tras abrazar al Senhior y sentir como me daba besos en la mejilla, decidí mirar al frente con la sorpresa de encontrarme a Uriel apoyado en la ventana, mientras que su cuerpo brillaba de forma dorada como él es, nada más verlo y emocionada por lo ocurrido le dije “Uriel, mi amor, te veo” y él sonrió felizmente y se acercó a los pies de la cama, le miré a los ojos verdes, hermosos que tiene, mientras que él me acarició con el dedo índice de la mano izquierda mi mejilla derecha y me dijo “Mi amor, despídete, que ya es tarde”. Le di un último abrazo al Senhior y miré a Uriel que me dijo “Túmbate, yo te agarro, mi amor” hice lo que me dijo, me dejé caer de espaldas y quedé de nuevo en sus brazos, me agarró fuerte contra su pecho, que noté las pulsaciones de su lindo corazón que iban muy rápido, además que ahora empieza a hacer más calor, él ya vuelve a ir con la túnica roja que veis en la imagen. Yo creo que le encanta agarrarme así, no puedo negar que a mí también, es ¡buenísimo! 

Pensaba que ya volvería a 3D, que pronto iba a sonar el despertador y el increíble día estaba a punto de empezar, pero la sorpresa fue que él no me dejó de nuevo en la cama, sino que Uriel se sentó en la cama y me quedé sentada encima de sus piernas, abrí de nuevo el tercer ojo y me encontré de nuevo con su mirada hermosa que me estaba mirando, unos ojitos tan lindos que no sé ni cómo puedo describirlo, en serio, deben probarlo. Me acerqué para darle un beso en sus labios, pero antes de hacerlo cuando ya notaba su aliento en mis labios él me interrumpió y me dijo “Mi amor, tienes visita, no estamos solos” me separé y le volví a mirar a los ojos y vi como él miraba hacia atrás de mí, giré la cabeza y ¡vaya sorpresa! El Arcángel Haziel estaba sentado en la cama también cerca de mí almohada, ¡qué bello! 


Uriel aprovechó y me ayudó para dejarme encima de la cama mientras que él se quedó de nuevo de pie y yo me fui a abrazar a Haziel, me aferré a su cintura mientras que Haziel me daba un beso en la mejilla y un segundo beso en el cabello y le dije “Me alegro de volver a verte querido Haziel” y él me dijo “Lo mismo digo amada Flor de Lys”. No sabía por qué estaba allá pero algo me decía que iba a ser una charla importante, antes de que pudiera decir nada Uriel dijo “Parece que aún no estamos todos…” yo miré toda la habitación y no me pareció que faltaba nadie, estaba Uriel y también estaba Haziel, ¿quién podía faltar? Entonces Haziel dijo “Creo que está detrás de la puerta, Uriel” y Uriel dijo “Solo abriré, si tú, mi amor, quieres que abra la puerta y entre” me quedé intrigada y por eso dije “Claro, que pase…” así que Uriel abrió la puerta y de allí entró el arcángel que faltaba Rafael.


Rafael se me quedó mirando tras la puerta, me sorprendió su visita, nunca había estado en mi habitación y era todo un honor que él me visitara así que le dije “Bienvenido querido hermano Rafael” él se acercó y sin sentarse le rodeé la cintura con mis brazos y me dijo “Gracias por dejarme entrar, amada Flor de Lys”. Me quería poner de pie pero no me dejaban ya que decían que era peligroso, no me di cuenta de que el suelo hacía bajada, me quedé mirándolo y dije “Pero… ¿Por qué pasa esto?” entonces Uriel dijo “Mi amor, no estás ni en 4D ni en 3D, estás en el medio” levanté la mirada sin creerle y él dijo “No te preocupes que podrás regresar sin problemas, esto sin querer puede ocurrir”, me asusté porque pensaba que había caído de nuevo en coma, una tercera vez no sé si podría soportarlo… pero las palabras de Uriel me aliviaron bastante y decidí mejor no moverme de la cama tal como decían ellos.


Uriel aprovechó para dar por comienzo la charla, dejándole a Haziel que hablase primero, me puse a su lado y le agarré la mano izquierda que tenía encima de la cama y empezó a hablar…

Amada Flor de Lys,

Eres la luz del Sol que brilla en tus ojos, eres la luz de Dios que emana en tú corazón y por tus venas riegas tú corazón con el amor incondicional del Gran Padre y de la Gran Madre. La luz blanca del Padre te bendice en su amor, para que recojas todos los frutos que has sembrado en tú memoria y regreses a casa, porque el Padre te está esperando, para que trabajes con él en este plan divino en otra perspectiva, en las dimensiones superiores.

Bendecida eres por el Padre y la Madre de tú creación,

Yo soy el Arcángel Haziel.

Terminé dándole un beso en la mejilla y abrazada a Haziel para agradecerle este hermoso mensaje, cuando terminó, Uriel le dio paso a Rafael, se acercó y se sentó, entonces, me agarró de la cintura y me puso encima de sus piernas y empezó a hablar…


Querida amada y bendecida Flor de Lys,

La luz que llevas en tú corazón no es simplemente verde y azulada, sino que reside en el fondo de tú corazón la luz pura de un ángel, la luz pura de un guía y la luz pura de un Maestro, bañada en esa inocencia dónde el Maestro Jesús dijo a sus hermanos que podrían ver el reino de Dios. La luz verde de la curación, junto a la luz azul de la valentía y la perseverancia, junto a la luz de la clarividencia, hace de ti un ser de luz que ilumina como un faro a todos aquellos que sigan en sombras y desequilibradas espiritualmente. Con un rayo de tú luz, expones toda fe, toda valentía y toda visión clara al corazón de cada hermano que persigue a su sombra constantemente, para darle la visión, la fe y la valentía de abrir la consciencia y poder despertar conscientemente.

Sigue la luz y el sendero se volverá cristal,

Con mucho amor,

Yo soy el Arcángel Rafael.

Recuerdo muy poco de lo que pasó después de los dos mensajes, aguanto muy bien los viajes, pero ese día estaba bastante cansada y un poco nerviosa por Port Aventura, supongo que eso provocó que viera las últimas palabras de Rafael con síntomas de mareo tan profundos, que me caí de espaldas y vi como Uriel se acercaba a mí llamándome por mi nombre y yo no respondía, entonces Haziel se retiró y con la ayuda de Uriel me pusieron de nuevo en la cama. En ese momento Rafael me quiso mirar y les dijo “Es un simple mareo, ya se le va a pasar, en cuanto vuelva a su dimensión debería tomar mucha agua para compensar” Uriel acató la orden y les dijo que abandonaran la sala, Haziel lo hizo y Rafael también, Uriel se quedó tumbado en la cama esperando a que bajara de dimensión mientras me cantaba la Nana de Uriel (que la tenéis en el youtube buscad Laia Galí HR), para no bajar de golpe y tener la nariz de esa forma.

Lo bueno fue que una vez de nuevo a la 3D se me pasó todo el mareo, Uriel aprovechó para darme una botella de agua que tenía guardada en el suelo y me pude recuperar, una hora después sonó el despertador y la experiencia de Port Aventura empezó.

Recomendación: Que sea la luz – Hillsong en español.

HR.

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¿Un Demonio Siempre Ha Sido Malo?

  ¡Feliz año a todos! Dejamos atrás el año del infinito (2+0+2+4=8) y nos vamos centrando en el año de la divinidad (2+0+2+5=9). El año pa...