Después de interrumpir durante un mes el tratamiento de
fortalecer la glándula pineal a través de comer una vez a la semana moras o
frambuesas, hace dos semanas pedí al cielo una ayudita para poder canalizar
mejor, ya que la situación que estoy en estos momentos funcionando al 80% como
emisaria del rayo verde con enfermos que necesitan de mi atención, tanto emocional,
físico o espiritual, mis condiciones de concentración para entrar en meditación
se han visto un poco afectadas, ya que ahora me cuesta más entrar en 4D y 5D,
mantenerme en ese estado cuando en 3D durante el día a día haces grandes
esfuerzos con tú rayo, es difícil poder mantener esos contactos con Uriel o una
vez en 5D con los Maestros, Guías, Ángeles, etc…
Curiosamente hace una
semana que inesperadamente mi amigo que canaliza el Maestro Jesús, que le está
enseñando medicina natural a través de sus prácticas, me envió un mensaje que
era el siguiente:
Para mejorar tú
concentración para meditar y canalizar mejor, deberías conseguir cola de
caballo, para hacerte infusiones.
Me sentí muy alagada recibir la respuesta a mi pregunta, así
que en los próximos días he ido al arbolario y he comprado medio paquete de
Cola de Caballo para hacer infusiones. Entonces me volví a poner en contacto
con mi amigo para saber qué tenía que hacer con eso, y él me dijo que me
hiciera un litro de infusión guardado en un jarrón, y tomar durante una semana,
porque es una hierba diurética (hace trabajar mejor los riñones y para no
cargarlos mejor no hacerlo más de una semana como mucho dos), y tomarlo tres
veces al día uno por la mañana (antes de desayunar), luego al mediodía (después
de almorzar) y una a la noche (después de cenar). Lo único que añadió Uriel fue
lo siguiente “Mejor que sean en vasos
pequeños”, llenar un vaso pequeño y ponerle solo una cucharadita de azúcar
(para quienes quieran) y tomarlo templadito.
La cantidad para hacerla es un puñado, nada más, hay que
esperar a que hierba el agua y echarlo, luego mezclarlo un poco, y seguidamente
esperar a que se haga cinco minutos, parar el fuego y dejarlo reposar allí
mismo, y hasta que la hierba deje de flotar, luego lo introduces en un jarrón
con tapa, a través de un embudo, y las hierbas se quedan en el fondo para no
pasar al jarrón, dejar que se enfríe en la intemperie y seguidamente ponerlo en
la nevera, a la hora de tomarlo que sea templado, si queréis lo ponéis un poco
al microondas o sino cuando os pongáis a comer o almorzar lo dejáis unos
minutos fuera de la nevera.
El Primer
Día
Yo empecé un viernes por la noche, después de cenar y de
estar un ratito en el ordenador que tenía que escribir un poco de la Telenovela
HDLH, me hice la infusión, tuve que esperar a que estuviera listo, cuando ya me
lo había servido en un vasito, le puse el azúcar, lo alcé un poco y me dispuse
a hacerle una oración a Dios:
Dios, mí creador, mi
padre, permítame poder concentrarme mejor, meditar mejor y tener mejor
experiencias con los Seres de luz, tomando esta infusión que viene de tu hijo y
Maestro Jesús. Amén.
Me lo tomé. Seguí con mi vida, como aún era pronto para ir a
Xauxa, seguí escribiendo. Me encontraba en la mesa del comedor de mi casa,
cuando me dispuse a escuchar un mensaje canalizado de otra persona a través de
Youtube del maestro Saint Germain, cuando lo estaba escuchando, solo eran diez
minutos de video, cerré los ojos y abrí el corazón.
De repente, sabía que no había nadie detrás de mí, que solo
estaba la vitrina, pues noté como una mano de Uriel me agarraba el hombro
izquierdo, y pasaba su mano por todo mi brazo hasta entrelazar sus dedos con
los míos, al mismo tiempo reposó su cuerpo en mi espalda, dejándose caer
suavemente y muy amorosamente, luego me subió un poco los pelos de la nuca y me
dio un beso en mis cabellos, apoyó su cabeza hermosa encima de la mía y
estuvimos así durante los diez minutos que duraba la canalización. ¡Fue
hermoso! ¡Fue como si estuviéramos en la cama, lo notaba muy físicamente!
De hecho minutos antes a tomar la infusión, seguía
trabajando cuando de repente de reojo a mi izquierda vi a Uriel un par de
segundos, pero automáticamente mi cabeza se giró y no lo vi, pero sabía que
estaba allí, mirando qué hacía, fue maravilloso. Cuando ya estaba en la calle y
la puerta de mi casa se cerraba detrás de mí, escuché cómo Uriel hablaba
conmigo sin usar la intuición del corazón para hablarme, es decir, usando
palabras con voz que sonaban en el viento, no lo veía en ese momento a mi
izquierda (siempre está allí, dice que le gusta ese lado, incluso en la cama),
curiosamente estábamos hablando de Xauxa y del concierto del día siguiente,
también estábamos hablando de Orange, cuestionábamos si mañana aparecería y sus
palabras textuales fueron los siguientes “Yo
siento que mañana él vendrá”, me hizo mucha ilusión escucharle su voz,
normalmente escucho susurros de una voz masculina un poco distorsionada debido
a la energía que se gasta al intentar escuchar la voz de los ángeles. Pero esta
vez al tomar la infusión de cola de caballo, y pedirle concentración a Dios,
pude escuchar su verdadera voz angelical perfecta y muy hermosa.
A las tres de la madrugada, cuando volvía a casa desde
Xauxa, le dije a Uriel suplicándole que se metiera en la cama porque le
extrañaba mucho, solo hacía dos noches que no lo notaba, y cuando hay un noche
que no lo noto, lo extraño aún más. Él no dijo nada, pero cuando llegué a casa
enseguida me puse el pijama para irme a dormir, me metí en la cama, cerré la
luz y me dispuse a meditar profundamente…
La sorpresa llegó enseguida, al conectarme en la 4D y notar
los abrazos de Uriel que me agarraban por la espalda, de nuevo yo miraba a la
pared y él me agarraba un brazo por la cintura y otro lo ponía por debajo de mi
cuello, así haciendo la cucharita, tan hermosa como siempre. No dije nada, no
quería decirle nada, ni le di las gracias, simplemente quería estar así el
máximo tiempo posible, ya que como siempre si hago cualquier movimiento todo
desaparece, pero él notó que me había puesto un poco en tensión, y cuando lo
notó, él me apartó el pelo de encima de mi oreja derecha y puso sus labios en
ella para darme un beso que me provocó cosquillas por todo el cuerpo, yo tengo
las orejas sensibles, seguramente que es motivo de que normalmente los ángeles
suelen susurrarme de una forma tan dulce que cuando alguien me susurra en la oreja
automáticamente se me pone el cuerpo la piel de gallina, un pequeño defecto muy
bonito.
Sin darme cuenta subí de dimensión hasta llegar a la 5D,
¿Saben cómo lo supe? Porque como os lo dije anteriormente, en 5D mi casa es un
hotel, y en mi habitación estaba el Maestro El Morya y el Maestro Sain Germain,
que nos interrumpieron sin querer. Es un Hotel dónde se acogen todos los Seres
de Luz, es muy bonito, de hecho hace años me propusieron hacerlo y no me pude
negar porque la razón es muy buena, ya que había estado anteriormente, y no me
refiero simplemente cuando os lo conté, sino mucho antes, cuando no sabía que
realmente eran seres de luz, pero quise montar el hotel en 5D para eso, de
forma gratuita, ya que el dinero en 4D y 5D pierde totalmente su valor y no
existe.
Así que nos separamos un poco y me dispuse a sentarme en la
cama, para invitar a los Maestros a sentarse por el cual el Maestro El Morya se
quiso quedar en la alfombra en posición del loto, mientras que Sain Germain
aceptó mi propuesta y se sentó a mi derecha, mientras que Uriel se quedó a mi
izquierda.
Bienvenida mi querida
Flor de Lys,
Yo soy el Maestro
Sain German, y todos los seres de Luz te agradecemos que hayas aceptado esta
ayuda en forma de infusión, para ayudarte a canalizar mejor nuestros mensajes,
y a concentrarte mejor en nuestros presentes y futuros encuentros, aquí en la
5D o en la 4D.
El viaje que
decidiste empezar hace ya un tiempo, está llegando a su nueva etapa, el tiempo
que ya llevas transmutando tú energía, te lleva en ventaja llegar dónde estás.
Ayudando a los demás, siguiéndonos a cada paso que haces, en cada respiración y
en cada pensamiento positivo que envías a alguien a través de tú hermoso y
querido corazón. Nos complace verte cómo haces llegar nuestras palabras a la
humanidad, sea escrito en una reflexión como a la hora de hablar de nosotros
persona a persona, hermano a hermano.
Tú energía ayuda a
curar almas que llevaban tiempo masacradas, cada vez que usas una palabra y en
tú corazón estamos nosotros, curas mil almas de un solo soplo, como si fuera la
última vela de una tarta que se está gastando, y al soplarla se enciendan todas
las demás en vez de apagarla y hacerlas morir en su final, así provocando el
nuevo resurgir de la consciencia, el despertar que llega contigo y siempre con
nosotros. Transmutamos las energías para dejar que el alma de alimente de los
demás rayos, para que despierte conscientemente y se haga así la ascensión
planetaria, para volver a estar juntos, viviendo con nosotros, mis queridos
hermanos y hermanas de la superficie.
Os amamos de corazón,
os ayudamos y trabajamos con todos vosotros siempre, y siempre que lo deseáis,
venid a buscarnos, llamadnos y os ayudaremos.
Yo soy el Maestro
Sain Germain.
Enseguida le di un abrazo a Sain Germain y le di les gracias
por su mensaje, el Maestro El Morya no tenía ningún mensaje solo me miró me
sonrío y cuando se levantó nos dimos un abrazo, entonces, volví a quedarme
tumbada en la cama y escuché que lo siguiente…
Todo cambio tiene sus
recompensas, y sus recompensas compensan su corazón, llenándolos de amor
incondicional, con nuestra compañía.
Maestro El Morya.
El Maestro El Morya me dio un beso en la frente, mientras
que bajaba de dimensión para volver a la 4D y quedarme allí junto a Uriel, que
se quedó sentado encima de mis pies.
Fue en ese momento cuando recordé las palabras de mi amigo
cuando me comunicó a través de canalizar al Maestro Jesús, que la infusión me
ayudaría a tener mejor experiencias con los seres de luz. Entonces comprendí
que por primera vez en mucho tiempo, podía intentar algo que hacía tiempo que
quería probar, pero solo lo quería hacer con Uriel. Así que, aventurada de
hacerlo, saqué el brazo derecho de debajo de la manta y del nórdico, para que
Uriel me viera y me agarrase la mano, pero cómo notaba que no me estaba viendo,
porque estaba de espaldas, entonces decidí mover los pies, él se percató, se
giró y cuando vio mi mano, enseguida sin pensárselo dos veces me dio su mano
entrelazando sus dedos con los míos, hice un poco de fuerza hacia a mí para que
viniese a mi lado, y él que le había dejado el lado derecho de la cama, porque
yo seguía mirando para la pared, se puso dentro de las mantas y él quería
abrazarme igual que antes pero no le dejé.
Enseguida sin que él se lo pensase me giré de golpe, le puse
mis brazos alrededor de su cuello y la pierna derecha en sus nalgas agarrándome
como si fuese un Koala, y me quedé así, a muy pocos centímetros de su boca.
Allí me di cuenta de que él iba tan solo en paños menores (calzoncillos igual
que Jesús), podía notar sus músculos perfectos, que me rozaban la piel, él como
reacción me agarró de la cintura, y nos quedamos de lado así durante un buen
rato, cuando retome más fuerzas, abrí los ojos, y sus ojos verde cristalinos
hermosos, se chocaron con los míos, una linda sonrisa se iluminó en su cara,
igual que la mía, con una de mis manos le empecé a tocarle el pelo castaño
rizado, hasta que le di un beso en la frente, y le dije “¡Gracias, por todo!”.
Nos abrazamos muy fuerte, notaba sus pulsaciones del corazón que eran perfectas a la vibración acelerada de 4D, ambos corazones latían al mismo ritmo, ¡qué hermoso! Finalmente me quedé dormida colocando mi cabeza en su pecho, respirando al mismo tiempo mientras que él me acariciaba el pelo, ¡qué amor más grande! ¡No quería despertarme! Pero justo al decir eso, mi madre abrió la puerta pero ella sin verme me dijo “tienes que ir al hospital a hacerle compañía a tú abuela”, cuando ella miró, Uriel estaba de pie al lado de la cama, pero como la vibración para ella es distinta, yo seguía viéndolo aunque cada vez era más difícil mantenerse en 4D, lo veía cada vez menos, se iba difuminando poco a poco.
Después de aceptar la propuesta de mi madre, ella se marchó
dejando la puerta abierta, el Sol entraba en la habitación, con los ojos
abiertos, vi como Uriel se agachaba y me susurraba “¿Qué quieres hacer?” y yo le contesté “Tengo que ir, diez minutitos y me preparo”. Él aceptó sin más, vi
cómo volvía a levantarse y se iba hacia la silla, a colocarse su túnica de nuevo,
pero yo le dije “No te vayas” él se
giró y me sonrió para decirme “Estoy
aquí, siempre”. Enseguida lo dejé de ver, pero su presencia seguía junto a
mi lado, me desperté y me fui a empezar el día.
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