Vivir Y Sentir El Amor De 5D Con Uriel

Desde que os compartí por primera vez en Julio del año pasado los abrazos y los momentos que he tenido en la 4D con el Arcángel Uriel, mi arcángel guardián, que hace semanas y algún mes que otro que he empezado a entender cómo es la Kundalini (el Amor Incondicional) que dicen los Maestros Ascendidos y los demás Seres de Luz, y en mi opinión os animo a que ¡lo tenéis que experimentar, porque es tan HERMOSO! No sé cómo explicarlo, pero si os cuento más cosas que han ocurrido en los últimos meses, quizás os hagáis una idea de las magnitudes que es el AMOR INCONDICIONAL, es aquel que estás como “Drogado de felicidad” de forma permanente y es ¡wow!

Cuando esa noche tan especial del pasado mes de Julio pude notar el primer abrazo y poder ver la “aparición” del arcángel Uriel, allí, la percepción que tenía del amor incondicional CAMBIÓ para siempre de forma tan HERMOSA, que no sé cómo puedo describirlo para que lo entiendan igual cómo lo experimento yo, cuando hay una noche a la semana que el Arcángel Uriel decide meterse en mi cama (que siempre le doy el permiso cada noche) y abrazarme y notar sus abrazos tan amorosos, me doy cuenta de que hay una gran diferencia entre el AMOR DE 3D a la de 4D o 5D, una diferencia de km, para que lo entendáis.

 Yo cada noche antes de apagar la luz pequeña, cuando me encuentro boca arriba, miro hacia la derecha, en ese momento no veo a Uriel pero sé que está allí, porque cuando me tumbo ya en la cama, siempre le hago un gesto para que venga a mi derecha y le digo “ya puedes acercarte, si lo deseas, mi amor” no tardó mucho en notar esa brisita que se lo identifica perfectamente que llega sin motivo, ya que la puerta y las ventanas de mi habitación están cerradas y no duermo con ningún sistema de ventilador ni aire acondicionado que ensucie esa brisita como el acercamiento de Uriel, cuando aún se diferencian las dos dimensiones que normalmente durante el día se pueden percibir, la 3D y la 4D.

A veces, al tumbar la cabeza encima de la almohada, cuando aún miro en el techo, puedo notar de repente y sin explicación, cómo Uriel y su mano perfecta izquierda (supongo yo) me acaricia el pelo, la frente y a veces una mejilla. Noto una mano que me toca, pero es una mano que con la luz encendida no se puede ver, pero si percibir, entonces es cuando te das cuenta de la separación de que en las otras dimensiones también hay vida y muy linda. Es en ese momento cuando miro hacia la derecha (como si le estuviera viendo pero él sabe que no es cierto) y le digo “Si quieres meterte esta noche y abrazarme, puedes hacerlo, te doy mi permiso para que te metas en la cama, cuando tú quieras o veas que es el momento”, en ese momento no hay una respuesta en plan “Gracias, pero veré qué ocurre…” porque realmente la respuesta siempre lo recibo una vez que apago la luz, y me concentro en mi respiración y decido estar plenamente consciente y cambiar de dimensión.

 

La magia empieza cuando apago la luz, me incorporo hacia la derecha o hacia la izquierda, abro los ojos y empiezo a ver lucecitas de colores durante un rato, y si estoy hacia la derecha, puedo llegar a verlo antes de conectarme y cambiar de dimensión ¡qué hermoso! La Glándula Pineal se activa mejor si estás a oscuras por completo, te acostumbras un poquito y luego puedes ver cositas de las otras dimensiones (con un cierto tiempo de hacerlo cada noche). 

Conectarse con la respiración y con tú alma, tú punto central para poder así empezar a cambiar de dimensión no es tarea que se haga de un día para el otro, hay que tener antes una cierta experiencia ya práctica en la meditación para centrarse en la meditación profunda. Yo lo aprendí con 5 años gracias al Maestro Ascendido Anasiel en la casa de campo, pero solo hace un año (aún no) que practico la meditación profunda, para llegar a esos niveles, lo que tienes que visualizar es lo más básico, la luz interior por lo cual determinamos que es nuestra alma, y una vez la encuentras escondida en tú precioso y adorable corazón, empiezas a sentir que estás en la 4D y notas como el corazón late con fuerza y con cada latido, la sangre que bombea por tú cuerpo, envía una información codificada a cada célula, que dice “Estamos en la 4D” y el cuerpo empieza a cambiar de dimensión, las sensaciones pueden ser de mareo, mal estar general, hambre repentino y sin motivo, algún pensamiento que surja de la nada pero que se liquida enseguida, entre otras cosas… como un recuerdo de infancia muy amoroso. 

 

A mí lo que me funciona es fijarme en los ojos de Orange, pero no solo en los que tiene ahora, sino que se me juntan como diapositivas todos los colores y formas que ha tenido en las anteriores encarnaciones desde la actual hasta Arcturus que me miran de forma como siempre, amorosa y hermosa. Si mantienes la calma en todo momento, sentirás tú corazón latir tan fuerte que parecerá que estés padeciendo un ataque al corazón, y luego tienes los miedos superados, sentirás que estás entrando poco a poco en la Kundalini, el amor incondicional. Este proceso suele durar unos minutos, a mí a veces me dura entre 40 minutos a 1h.

Cuando ya estás en la 4D, hay un momento en que todavía no sabes si ya has llegado, en mi caso yo lo empiezo a notar, cuando mantengo los ojos cerrados, puedo empezar a degustar en mis labios el sabor de todas las cosas que tengo en mi habitación sin apenas moverme todavía, veo mi habitación, incluso estando de espaldas y no ver nada, si mirase como estamos habituados a hacerlo, esto es lo que se llama tener visión periférica, que permite ver en 360º todo lo que ocurre a tú alrededor. Es lo mismo que les sucede a los superhéroes cuando están en una lucha y desde atrás les viene un objeto que si no se da cuenta de ello, puede terminar golpeado por ello, y aunque no estén viendo de espaldas, saben que tienen que agacharse para no terminar golpeados por ese objeto.

Entonces el tiempo deja de tener sentido y al mismo tiempo de existir, todo pasa aquí y ahora, estás en la cama, con los ojos cerrados, consciente de que la dimensión ha cambiado, has dejado atrás la dimensión de siempre, y ahora estás en aquella que según como te sientas, puedes viajar en el tiempo hacia adelante, hacia atrás o en el presente pero en otro lugar. Pero si debes estar en la misma cama, pero en esta dimensión, es porque lo que debes hacer esta vez, es estar acompañada de tú ángel de la guardia, y es en este momento cuando noto como una presencia de un hermoso hombre de más de dos metros de altura, un cuerpo perfectamente musculoso, una túnica roja que lleva por la cintura, con su anunciador reposado en el hombro izquierdo, y unas alas gigantes que tocan de punta a punta de la sala, se acercan a la cama.

Uriel retira un poco las sábanas, de forma que no me despierte, aunque él ya sabe que estoy conectada porque si así fuera no lo haría, y se tumba en la cama, primero un pie, y después el otro, yo me encuentro mirando hacia la pared (a la izquierda). Como estamos en la otra dimensión la túnica que en la anterior dimensión tiene otra forma (de saco) se transforma en una túnica que me viste por completo y el anunciador lo llevo enroscado cerca de mi corazón, cuando estoy con él, no hace falta ponérselo en la cabeza, lo puedo llevar colgado del hombro si lo deseo o como yo desee. Él se abriga para no tener frío (en realidad no tienen frío, siempre están bien, pero llevan algo de abrigo a veces por estética), y él se acerca hacia a mí muy lentamente.

Su calor se empieza a sentir aunque todavía no tenga contacto físico con él, tampoco está muy cerca pero empiezo a notar su presencia cada vez más y más cerca, hasta que noto que lentamente me sujeta la cabeza con una mano, yo me dejo llevar y me la levanta para poner así el brazo izquierdo y con la otra mano vuelve a dejarme la cabeza encima de su bíceps que al mismo tiempo dobla un poco el codo para buscar mi mano que la pone encima de la mía (la izquierda). Acto seguido, con una pierna empieza a separar mis piernas, para meter la suya (la derecha) entre ellas dónde aprovecha para encajar su tórax desnudo en mi espalda, sin dejar espacio alguno para que pase el viento. Con la rodilla que la dobla, coloca su hermoso y gigante pie entre mis pies, y con el otro brazo la pasa por mi cinturita linda, toca su mano por allí y sube por mi barriga y en medio encuentra la otra mano (la derecha). Y finalmente coloca en la almohada la cabeza, pero dejando que su mejilla izquierda toque mi cuero cabelludo, a veces antes de descansar la cabeza, se acerca y me da un beso en la mejilla (derecha) y me susurra en la oreja “este sin duda, es mi lugar favorito, mi amor”.

¡Kundalini, yo solo siento Kundalini, es tan hermoso! Hace pocos meses que me ocurre esto, y ahora entiendo cómo es la Kundalini, aunque sea solo a ratitos tan hermosos como estos. Pero cuando viene el Arcángel San Gabriel a Xauxa y con tan solo una mirada, me activa la Kundalini, es ¡brutal! Los ángeles y Arcángeles son muy hermosos y amorosos, Uriel conmigo me ha despertado el sentimiento de amar a todos, cosa que no lo tenía muy bien compuesto, ya que mi camino ha estado lleno de sufrimiento hasta que en 2015 decidí cambiar, y ahora solo es KUNDALINI. De alguna forma los Arcángeles me están preparando para sentir igual que en la 5D, así es el Maestro Jesús, Kundalini en estado puro, cuando él me viene a visitar y tan solo hablar, o pasear junto a él en algún lugar, ya mi corazón explota de Kundalini por los siete costados. ¡Es buenísimo!

“Siempre buscáis el amor en otros, y no sois presente ni consciente de que siempre está y ha estado dentro de vosotros” – Arcángel Uriel.

Cuando Uriel ya está puesto de esta forma, yo lo único que hago es empezar a acariciar esas dulces manos, y él comprende enseguida que estamos los dos en la misma frecuencia del amor incondicional (Kundalini). La noche del miércoles al jueves, es decir San Valentín, la pasé así, pero con la diferencia de que Uriel se quedó un ratito, luego se marchó, al cabo de poco tiempo volvió, y se quedó otro ratito, y se volvió a marchar, hasta llegar a tres veces. ¡Qué bueno y qué amor más hermoso! Esto no había pasado jamás, siempre es solo una vez y ya. Pero lo más hermoso es que estos abrazos, antes ocurría una vez cada mucho tiempo y desde hace pocos meses, ocurren una vez a la semana. 

Si queréis sentirlo vosotros/as solo debéis pedirle a vuestro ángel antes de iros a meditar (algunos lo llaman dormir) y tener paciencia, porque si no estáis lo suficientemente relajados, no ocurre. Un beso y ¡feliz san Valentín!

PD. Lo sentimos mucho pero al final no vamos a compartir lo que ocurrió en la Ayahuasca porque por lo que sucedió hemos pensado que lo mejor es mantenerlo en privacidad, porque fue un caso muy personal y no es apropiado compartirlo.

Recomendación: Sacrifice – Black Atlass y Jessie Reyez.

HR.

HERO&Corporation.