Me encontraba de pie, acababa de cambiar de dimensión en 4D,
seguía en mi habitación al lado del Arcángel Uriel, debería estar en la cama,
esperando el cambio de dimensión pero quería estar al lado de Uriel, entonces
le pregunté “¿Cuándo podré empezar a
cambiar de dimensión sin tener que estar obligada a tumbarme en la cama?” y
él contestó “Muy pronto, mi amor. Pero
es la hora, deberías tumbarte y fluir a la 5D, Anasiel quiere verte”. Sin
decir nada más, le di otro abrazo a Uriel y él mismo me agarró de las piernas y
me llevó en brazos hasta la cama, me puso el anunciador por encima del pecho y
me dijo “Recuerda que te lo tienes que
poner en la cabeza, en cuanto llegues, ¿Oksham?” yo le dije que si con la
cabeza, él me dio un beso en la frente y cerré los ojos, para relajarme y
conectarme, enseguida mi corazón empezó a latir con más fuerza y se me presentó
la imagen de Anasiel en los ojos, para dejarme llevar allá donde él se
encontrase.
De repente sentí que caía, el viento me tocaba la cara
violentamente, abrí el tercer ojo y efectivamente estaba cayendo de una altura
de dos metros encima de un sofá blandito de color chocolate. Tengo que vigilar
con los aterrizajes porque si me lastimo una mano, o cualquier parte del
cuerpo, al viajar físicamente, cuando regreso a mi dimensión, tengo las
heridas, por eso a veces regreso con heridas superficiales en la piel, como
rascadas, golpes, y algún dolor muscular puntual, el aterrizaje es lo más
difícil. Me encontraba en una sala dónde había mesas con libros, estanterías
con muchos libros y no había paredes, todas eran de cristal excepto la de
delante que estaba abierta y daba directamente al exterior, me levanté, me puse
el anunciador en la cabeza de aquella forma que los Maestros quieren que lo
lleves si estás en Maestría y salí a fuera.
Enseguida reconocí el lugar, me encontraba en la ciudad de
luz llamada la Torre del Conocimiento, esta vez estaba en las casas de
alrededor de la Torre inclinada (recuerden que la Torre de Pisa es una
imitación de la Torre de esta ciudad de luz, que simula la antigua Torre de
Babel). Esta ciudad está rodeada de maravillosas montañas, cascadas y ríos,
cuando salí a fuera, la temperatura era muy agradable parecía verano y
primavera al mismo tiempo, de repente al ver hacia dónde iba la calle que el
suelo estaba hecha de rocas y era estrecha, reconocí a una chica que
curiosamente es una vieja amiga que la conozco de cuando estudiábamos en
Coventry, estudiábamos juntas la Alquimia de Merlín, ella me saludó desde lejos
con la mano y yo empecé a correr hacia ella, nos damos un abrazo, porque hacía
cinco años que no sabía nada de ella y le dije “¿Qué te trae por aquí, Mabel?” y ella dijo “Estos días estoy aquí, aprendiendo más sobre el universo dónde estamos,
¿y tú?” y yo le dije “El Maestro
Anasiel quiere verme” y ella dijo “Pues
ven conmigo, ahora me toca clase con él, seguro que se alegrará de verte. Ahora
tenemos que ir a la sala de Astronomía” no me pude negar y le acompañé.
Mabel es una chica de 24 años que vive en la superficie en
3D, pero ella es del norte de Europa, por allí Rusia. Nos fuimos muy contentas
contándonos un montón de cosas, hacia la clase de Astronomía que estaba en el
pico más alto de la ciudad. Esta ciudad se llama así no simplemente por la
Torre sino porque es una gran biblioteca, la más importante de Gaia, dónde se
almacenan todos los conocimientos de nuestra Galaxia Vía Láctea, en Montrat se
almacenan los conocimientos de la Espiritualidad, en Telos los conocimientos de
la física-cuántica y en ERKS los conocimientos del SER. Cada ciudad de luz
tiene su propia biblioteca, pero solo unas ciudades que son más grandes son los
que almacenan la gran sabiduría de Gaia. Recordando que esta sabiduría tiene
una copia en la Gran Biblioteca de Registros Akashicos.
Subimos las escaleras de metal para llegar a la cima de la
gran terraza dónde delante tenemos unas montañas hermosas, lo bueno de Agartha
es que siempre es primavera, siempre hay flores y nunca mueren, porque allí el
tiempo y el clima son distintos. Para entrar en la clase, debemos pasar por la
terraza, dónde hay una puerta con cristales que muestra toda la preciosidad de
la montaña. Dentro de la clase, solo hay que libros en cinco mesas de despacho
y cinco sillones, hay muchas estanterías con más libros y una escalera para
poder alcanzar los libros de la última estantería. Nos quedamos allí a dentro
cinco personas, esperando al Maestro Anasiel a que llegase, Mabel se sentó en
uno de los sillones, abriendo el libro de Astronomía por la primera página que
se le abrió y empezó a repasar.
Como me picaba la curiosidad, miré por encima de su hombro y
leí lo que estaban impartiendo el
teorema del gusano, es muy interesante, es la forma en como en el universo
tenemos las distintas vías para viajar de una punta a otra del mismo universo a
la velocidad más rápida que un rayo, al igual que decían en Star Trek a
velocidad de curvatura, pero más complexo. Usando algunos parámetros como por
ejemplo la teletransportación orgánica o la comunicación frecuencial
vibracional de nuestros cuerpos físicos, ya que el universo se compone de tres
aspectos: Luz, sonido y forma.
Las ventanas se abrieron sin explicación alguna y todos nos
sorprendimos, entonces escuchamos una voz que reconocía que era del maestro
Anasiel que decía “Si el universo es
luz, sonido y forma, ¿Cuál es la forma, cual es la luz y cuál es su sonido?”
y enseguida se materializó delante de la puerta que conducía a la terraza.
Mabel pensó bien la pregunta mientras que yo me dirigí hacia él para darle un
abrazo que él mismo aceptó y entonces Mabel contestó “el sonido es la frecuencia de nuestras cuerdas vocales, por lo tanto la
forma es la vibración de nuestro propio corazón que conjuntamente forman la
realidad, que hace referencia a la luz o a los ojos dónde todos observamos lo
que creamos nosotros mismos como realidad” le dio en el clavo.
Entonces Anasiel dio un paso al frente y con la ayuda de su
mano derecha lanzó de su mano una luz blanca que se elevó hasta llegar el
centro de la clase y dijo “Si la luz es
el ojo dónde se observa ¿Cómo podemos observar aquello que no es observable?”
nadie sabía cómo contestar, Mabel lo buscó en el libro pero Anasiel le dijo “No todas las respuestas están escritas,
querida” quería decir que no lo encontraría en el libro ni en otro libro,
que si quería encontrar la respuesta tenía que confiar en su corazón, ella se
levantó e intentó pensar la respuesta, pero yo me adelanté y dije “aquello que no es observable hace
referencia a la oscuridad, que si nuestros ojos son la luz de la observación,
cuando enfocamos hacia lo oscuro, solo veremos la luz. Por lo tanto, para
observar lo no observable, debemos estar a ciegas y confiando con los tres
parámetros del universo de luz, sonido y forma, conseguiremos ver lo no
observable” Anasiel dio por válida mi respuesta y Mabel se quedó bastante
curiosa, mientras que los demás compañeros intentaban aportar algo más.
En realidad una clase semejante ya la había impartido con
otro Maestro Ascendido, pero hace tiempo que dejé de pensar ¿Por qué se me
repiten las cosas? Ya que un Maestro jamás repetirá un aprendizaje si ya se ha
aprendido y si no se ha aprendido, volverá pero mostrándolo de otra forma.
Entonces Anasiel condujo a la clase en la terraza, le seguimos yo me puse a su
lado a su derecha y con la ayuda de su mano en la distancia condujo la luz
blanca hacia delante de ellos y con la otra mano creó una bola de energía de
color azul y preguntó “¿Por qué al
mezclar las dos energías que tenemos aquí, no se consigue una mezcla homogénea
y ambos simplemente se unen?” y era cierto, en alquimia las distintas bolas
de energía que puedes aprender a desprender de tus Chakras o de tus manos,
jamás harán lo mismo que si metieras en un vaso agua y azúcar, ni agua y
aceite. Porque la energía de la alquimia no tiene su finalidad de fusionarse y
ser uno, sino que tiene la finalidad de UNIRSE ser UNO.
Un compañero dijo “porque
encuentran por frecuencia y vibración componentes que son en común y por lo
tanto solo ocurre como la trinidad, de los opuestos aparece la UNIDAD, mitad de
cada opuesto formando UN SOLO INDIVIDUO” Anasiel también dio por válida esa
respuesta y unió las dos energías y dijo “¿Cómo
se consigue la UNIDAD en sistema IONICO?”. El sistema Iónico es un
componente que tenemos cada uno de nosotros en nuestras células, marcado en
nuestro ADN, y para poder crear nuestra propia realidad y nuestro camino hacia
la ascensión de usa un sistema de coordinación en puentes Iónicos para poder
transformar completamente nuestra realidad a través de la forma, la luz y el
sonido, es decir: cantar, amar y ver.
Otro compañero dijo “Se consigue a
través del reconocimiento de los espejos de uno mismo” Anasiel aceptó la
respuesta y dio por terminada la clase.
Me quedé con Anasiel mientras que Mabel decidió irse de la
clase, lo había ido a ver a él porque tenía una pregunta que sin plantearla ya
me la había contestado al poder asistir en esa clase tan divertida e
interesante. Él se acercó y me dijo “Me
alegra volver a verte por aquí, querida Flor de Lys” y yo le dije “Gracias Anasiel por permitirme estar hoy
aquí. Venía a hacerte una pregunta, pero, ya la has contestado, y ahora no sé
qué debo hacer” Anasiel me puso una de sus manos que seguía caliente por
las energías de antes que habían desaparecido en mi mejilla y con una sonrisa
serena dijo “Todo lo que tienes que
cambiar, lo tienes aquí a dentro (puso la otra mano encima de mi pecho, pero
debajo de mi cuello) Con un sonido, con un latido de un corazón amado, podrás
ver y reconocer quién YO SOY”. Le di un abrazo y él me invitó a ir algún
lugar para pasar el rato, mientras que fuese el momento de volver, y entonces
volví a mi dimensión con una sonrisa franca y feliz porque desde ese instante,
que empecé a llevarlo a la práctica y está funcionando.
Recomendación: Jelous Guy – The Beatles.
HR.
HERO&Corporation.
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