sábado, enero 19, 2019

Los 12 Días Sagrados Más Dificiles De Mí Vida (1/2)


¿Cómo os ha ido estos 12 días sagrados? Antes de empezar quería pediros disculpas por no cumplir con lo que dijimos, queríamos publicar todos los días, pero como ya sabéis, este blog no lo construimos solos nosotros, sino que la “Corporación” también tiene un papel importante, y en este caso, son los Seres de Luz de 4D y 5D. Parecía que iniciábamos el año de esta forma, publicando los mensajes para los días sagrados, pero a partir del cuarto día, los seres de luz quisieron cambiar la forma de compartir sus enseñanzas, con ellos no sabes ¿qué puede suceder? Es por eso que debemos confiar cuando nos los encontramos, porque debemos confiar en que si fluimos con ellos, siempre nos ayudan en nuestro proceso de evolución, porque hacen cualquier cosa para que seas feliz y entiendas ¿qué significa ser un SER DE LUZ? Así que todo cambió porque ellos quisieron hacerlo así y si fue de esta forma, fue porque por alguna razón (que vais a ver enseguida) tenía que ser así. 

Cuando empezó el tercer día, regresé del viaje un poco revuelta, ya que había recordado muchísimas cosas y todos los recuerdos fueron realmente impactante, automáticamente me di cuenta de que el camino que había elegido iba a descubrir todos los secretos que la vida escondió para mí, y porque fueron escondidos cuando parecía que lo que había vivido en las otras vidas, anclada en la 3D (solo en esa dimensión) parecía una VIDA, cuando ahora, al echar la vista atrás, parecía una larga espera de más de 12.000 años dónde tuve como todos, una vida lo que llamáis “normal”, sin Maestros, sin ángeles, sin recuerdos y muy lejos de la vida de los Seres de luz. Yo respeto a las personas que siguen pensando que la 3D es lo mejor, pero el giro de esta vida es la mejor decisión que tomé en 12.000 años, yo recuerdo que cuando nos informaron sobre la desconexión, yo no quería que ocurriese, pero era necesario para aprender mejor el camino que habíamos elegido, esperando el momento para VOLVER a ser lo que siempre hemos sido, seres de luz. 


Fue difícil recordar lo más oscuro y denso que viví no hace mucho tiempo (concretamente en la anterior a esta en 1875, dos años antes de casarme con el Marido Atlante por última vez), ver tus sombras del pasado que en cierto modo pueden ocasionarte problemas en tú presente, fue muy duro hacer de tripas corazón e intentar verlo con una perspectiva más evolucionada en luz. No fue fácil, pero lo conseguí. Entendí que seguiría recordando pero que cada vez será más intenso que la anterior, así que si los Seraphis Bey lo veían que estaba preparada, solo tenía que hacer una cosa, seguir adelante con ello. 

Durante el cuarto día, parecía un día como cualquier otro, también daba como referencia el camino, pensaba en compartiros lo que sucedía, pero curiosamente como era un día antes de la celebración de los Reyes Magos (Festividad de España y Cataluña) tenía asuntos que atender, así que lo dejé para el siguiente día (que tampoco pudo ser). Era viernes y tocaba ir a Xauxa, habían programado una fiesta inesperada que Uriel y yo tuvimos que asistir y trabajar con la energía del lugar, pero ¡qué agradable sorpresa fue ver como aparecía el Arcángel San Gabriel en esa fiesta tan grande que se originó! Siempre es una gran bendición recibir a los Arcángeles en Xauxa, yo personalmente se me ilumina mucho la cara cuando aparecen sin más (muchas veces directamente en medio de la pista, pero algunas veces pasan o simulan que vienen o del jardín o de la calle, pero en realidad bajan de la 4D, como si fuera un salto), la llegada de Gab siempre es como un rayo de esperanza que se me abre en el corazón, ya que él es el Arcángel Guardián del Marido Atlante y cuando viene siempre me dicen algo (tanto Gab como San Miguel) algo de él, y es realmente hermoso.

Pero la sorpresa fue que recibí un aprendizaje directo de Gab que no iba con segundas intenciones, y era totalmente directo, tan directo, que yo, queridos alumnos de mi corazón, si no lo vieron en Facebook y Twitter, acabé llorando (tanto el viernes como el sábado). A Gab no le gusta narrar historias, lo que le gusta es que mientras que él narra la historia tú pases por la experiencia de lo que te está explicando, es por eso que no todo el mundo puede llegar a entender ¿cómo se comunican algunos ángeles con nosotros? Porque de los 7 Arcángeles conocidos (que en realidad son 9) cada uno tiene su forma de expresarse y de comunicarse, y Gab lo hace de esta forma.

Sinceramente lo que hizo Gab fue muy sencillo, empezó el viernes, mostrándome un miedo que tengo y que ahora que estoy saliendo de forma oficial con el Marido Atlante, aunque yo ya no notaba que podía ser un problema, Gab veía que sí, por lo tanto, quiso ayudarme en ello. Fue una agradable sorpresa que viniera un viernes, normalmente aparece los sábados, y lo interesante fue que des del minuto cero en que apareció en el local, yo fui su principal objetivo. Como había mucha fiesta, pues él estuvo por la pista bailando, no pasó gran cosa durante la noche, hasta que llegó las 4am, dónde me lo encontré en la zona del jardín. No fue realmente una conversación, más bien él estaba lejos de mí, pero de todos modos, sus ojos no se separaban de los míos, poco a poco, mi corazón se fue abriendo hasta que al final todo lo que estaba fuera de nuestra vista, es decir, el jardín, Xauxa en sí, fue desapareciendo y cuando me di cuenta de lo que estaba pasando, ya era demasiado tarde como intentar pararlo. 

Caí al suelo. Levanté la cabeza y allí vi a Gab pero no me estaba mirando, de hecho se había cambiado de ropa, iba con su túnica blanca como de costumbre, sus ojos eran mucho más jóvenes de lo que ya recordaba y su pelo había crecido instantáneamente, los tenía largos y con rulos. Volví a levantarme, y vi cómo se acercaba y decía “Te esperaré lo que haga falta para volver a estar a tu lado, Haia (Flor de Lys en Sayónico)”. Le volví a mirar y vi que miraba a través de mí, me giré y me quedé plantada al verme a mí misma como flotaba en el universo mi versión más antigua de mí misma. Reconocí en qué momento me encontraba, era el momento en que abandonaba la Casa de Dios y me dirigía a encarnar a Arcturus. Entonces me giré y lo vi, me acerqué a él, lo intenté abrazar, pero no lo podía tocar, era como un fantasma para él, así que comprendí que ni me podía ni escuchar ni tocar, pero sus ojos estaban llorando, porque desde ese momento que ya no fuimos más una pareja.

Me mostró cada momento en que mis encarnaciones peligraban y que milagrosamente siempre me salvaba de algo, resultó que su mano divina desde la casa de Dios tenía algo que ver, al verlo, me emocioné tanto que no tengo palabras para darle las gracias de todas y cada uno de los momentos en que mi vida peligraba y él siempre intervenía (pero solo desde allí, desde la casa de Dios). Hasta que un día él se cansó de esperar al verme a los brazos del Marido Atlante, al principio lo comprendió como un trabajo más sobre la Red, pero al casarme con él ahí la cosa le hirió. Pero siguió con fe y esperanza hasta que durante la vida anterior (en 1863 hasta 1912) Gab decidió dejarme ir… y la salvación milagrosa dejó de aparecer…

Me sentí culpable al principio, de todo lo que había esperado y esperado que al final no fuera lo que él quería. Pero entendí muchas cosas que me ocurrieron en esta encarnación sobre el tema de la confianza hacia a los demás, yo soy una persona que enseguida agarro confianza con los demás, quizás mi punto de vista sea distinto, porque confío incluso con aquellos que acaban traicionándome sin motivo aparente, es decir, por su inconsciencia. Por lo que veo, mi confianza es semejante a la que tiene un perro con aquellos que los quieren, quizás por eso en una vida anterior, hace mucho tiempo, yo fui un lobo de montaña, que está reconocido que son los animales que aparte de vivir en manada, tienen una confianza muy elevada hacia ellos y hacia los demás. 

El motivo por el cual él regresó fue por la divina providencia que tiene Dios en crear conflictos, que por mucho que escapes de ellos, siempre hay uno que te da una sacudida tan grande que te hace pensar en cosas que hacía tiempo habías olvidado. Gab regresó mucho después de saber que había muerto en el Titanic junto a mi marido atlante, entonces él se culpó por no haber estado atento para que no se comprasen esos billetes, se atormentaba porque seguramente si así hubiera sido, a lo mejor hubiera tenido una vida más feliz, ya que no lo fue demasiado. Las cargas emocionales de la relación con el marido atlante eran tan grandes y pesadas que no se podía percibir la felicidad en ellas, pero hicimos de todo para seguir adelante con nuestra unión matrimonial, no tuvimos hijos, pero estuvimos unidos hasta los últimos segundos de vida.

Allí no pude contenerme y lloré, Gab lo notó, ya no vi nada más, enseguida regresé a Xauxa al tiempo actual y cuando Gab se acercaba para venir a consolarme, yo misma lo evité y me fui con Uriel a otra parte, dejándolo a él preocupado. Con Uriel aunque parezca raro, nos quedamos en silencio, mientras que apoyaba mi preciosa cabecita en su hombro y mis lágrimas salían como agua de mayo de mis ojitos. Estaba triste, dolida, pero sabía que todo lo que había pasado en el pasado era por una buena causa, aprender a amar, parece tan fácil en los cuentos de hadas y las películas, pero es lo más complejo que hay en el universo, ser amada y amar. Finalmente Gab decidió irse a las 5am ya había pasado una hora, Uriel y yo hicimos lo mismo, pensando que mañana sería otro día mucho mejor que este…

A la noche siguiente que era la noche de los Reyes Magos, fue también pasada por lágrimas y una vez más no eran de felicidad. Parecía que había empezado con muy mal pie este año, pero intenté hacer de tripas corazón y seguí como debía de ser, curiosamente y una vez más por sorpresa Gab se volvió a presentar, parecía renovado, pero yo también había decidido olvidarme de lo que había sucedido la noche anterior y por lo tanto, le fui a saludar nada más lo vi aparecerse, sus ojos y su sonrisa iban a acorde con sus sentimientos igual que los míos, me alegré mucho de verlo, como siempre y una vez más hablamos, y esta vez hablamos en una conversación convencional, con palabras en el Aquí y Ahora. Poco a poco agarré más confianza de cómo iba la noche, parecía que solo había sido un pequeño bache que se podía arreglar hablando y bailando, fue una noche llena de trabajo con la energía de siempre de Xauxa, así que con Uriel nos pusimos enseguida a trabajar y Gab dijo que nos apoyaría desde allí, lo aceptamos de todos modos, cuando hay tanta gente, va bien tener un grupo de apoyo.


Recuperé en su totalidad la confianza en mí misma cuando vi a Gab tan entregado y tan atento, como él es, tal cual lo hacen los arcángeles. La noche era totalmente distinta a la que había empezado, el miedo se disipó y llegó de nuevo la alegría en mi corazón y todo salió PERFECTO. Repentinamente se escuchó la canción de los ángeles, aquella canción que siempre cantan los ángeles, Uriel y yo bajamos del escenario y apoyamos desde la pista mientras que Gab y el grupo de ángeles, maestro y algún Elohim subían al escenario con el canal activado para cantar su canción de la alegría y de amor incondicional. ¡Adoro esa canción! Y desde que nos dejan ser partícipes, ¡aún más la adoro! Había escuchado cuentos en que a veces los Ángeles como modo de gratitud cantan a aquellos que saben apreciar su presencia y su colaboración, pero hasta hace un año y poco más, no lo viví y fue maravilloso.

Al terminar, vino la calamidad de nuevo… Gab me dijo telepáticamente “¿Te puedo pedir una cosa?” y yo le dije “Dime” y él dijo “intenta no perderme de vista, durante la noche de hoy ¿de acuerdo?” me extrañó su petición y le dije “¿Por qué?” y él enseguida dijo “Ya lo verás… solo haz lo que te pido, por favor” le acepté haciendo un pequeño gesto y lo observé. Subí de nuevo al escenario y seguí trabajando, canalizando los patrones sin dejar de observar al arcángel más brillante de la noche, Gab se encontraba justo delante del escenario bailando, disfrutando de la noche, encontraba su mirada, mirándome en secreto en ciertas ocasiones, no me pregunté nada al respecto a su petición, solo le seguí curiosa y muy intrigada, pero el miedo regresó a mí, tras la noche anterior, era difícil tener confianza de nuevo y seguir su juego. Pero igualmente lo hice, en ese momento estaba yo solita allí arriba, Gab lo quería así, Uriel seguía apoyando lejos del escenario. 

Desde dónde estaba podía escuchar la voz telepática de Gab que hablaba directamente a mi corazón y mientras que bailaba decía “Es momento que entiendas mejor lo que quiere tú corazón, y dime… ¿qué quieres corazón? ¡Habla sin miedo! ¡Habla confiando en mí!” entonces se hizo el silencio, parecía que Gab hablaba con mi corazón, en confianza, ajenos a mi consciencia, era raro pero los ángeles lo suelen hacer, si les das el permiso, yo una vez lo hice con un conocido y fue interesante, pero surgió. Lo que hizo Gab fue canalizar mi corazón, como si fueran dos amigos, pero yo no escuchaba nada, porque el corazón también tiene vida propia y habla con quién quiere (por eso nos enamoramos de corazones no de personalidades). 

Me dolió ver a Gab verlo ligar con una chica, no lo entendí en ese momento, ¿qué había pasado? ¿Qué había dicho mi corazón? ¿No habría sido capaz de mandarle a la mierda, cierto? ¿Es lo que realmente quiero? ¿Por qué me duele verlo así si realmente él solo me está ayudando a que la relación con el marido atlante salga bien? ¿Qué estaba pasando? ¡Se me quitaron las ganas de bailar, de trabajar y de estar allí! Pero seguí allí arriba, mientras que Gab parecía “disfrutar” en mi rostro se vio cómo a mi ya no me gustaba ese juego y me pregunté “¿Tengo celos? ¡No! Entonces ¿qué es esto que siento?” no pude contestar a mi propia pregunta, porque no sabía qué estaba ocurriendo. Repentinamente, agarré mis cosas y bajé del escenario, Uriel me vio y me siguió, Gab se dio cuenta pero se quedó a dentro, yo me fui al jardín.

Lloré, lloré y lloré… a Uriel se le ocurrió salir a la calle para estar a solas un rato, le hice caso. Estuve enojada con Gab no simplemente esa noche, sino que duró en realidad toda una semana, hasta que le pedí que volviera y volvió. Tenía que hablar con él, pero no ha habido la ocasión todavía, espero que sea pronto… porque él se quedó preocupado, él ya sabía que no me lo tomaría nada bien. ¡Odié sus formas de pasar por la experiencia para contarme las cosas! Hubiera sido mejor una narración… pero luego me di cuenta de que realmente estaba enojada conmigo misma… el EGO actúo en mi de muy malas formas, miedoso a ser obviado lo que no se podía ocultar ya por más tiempo, mi mayor miedo o uno de ellos que llevo toda la encarnación intentando lidiar con ella. Me llamo Laia Galí y tengo miedo al rechazo

Gab sabía que una narración no sería suficiente para que entendiera lo que me ocurre, de porque siempre me cuesta tanto conseguir compañía tanto amorosa como amistad, soy una persona bastante solitaria porque en mi infancia y mi adolescencia visto está que hubo ciertos acontecimientos que implicaron que ese miedo al rechazo existiera en este presente. Pero al contrario de los otros, yo lo admito y estoy trabajando para superarlo, aunque no es fácil. Nada fácil. Saber y comprender que desde la guardería he sido la repudiada de mí generación, es duro, porque aunque piensas que forma parte de mi pasado, sigue en el orden del día, sigue afectando bastante en mis relaciones sociales, tanto de amistad como amorosos. Lo que pasa que siempre lo he mantenido de puertas para dentro, ahora decirlo aquí delante de todos ustedes, no es fácil pero es un comienzo. 

Desde los seis años empecé a sufrir acoso escolar y duró mucho tiempo, unos diez años. En la guardería yo no quería socializar, porque quería pasarla con los ángeles (como ya sabéis, desde pequeñita que mi relación con ellos es muy estrecha y muy bonita), ya en parvulario (de los 3 a los 5) si que tuve principio de amistades, pero una chica tuvo celos de mí, sin saber porque, y puso todas las chicas en contra mía de repente y sin saber ni molestarme porque, sentía que no era importante. Y luego un alma oscura me poseyó (no es broma, escribí una reflexión hace un año, véanlo) y luego empezó el acoso escolar. Fui invisible durante ese tiempo para los compañeros de mi clase, que era con los que siempre me relacionaba… fue duro, pero fue más duro en la adolescencia. Así que el miedo al rechazo fue aumentando cada vez más… porque nadie me quería, nadie me hablaba, nadie se acercaba a mí para hablar, jugar,… solo cuando les acontecía se acercaban para burlarse de mí, en los situaciones y momentos más horribles que jamás podríais imaginar. 

Y la cosa no quedó en el colegio, ni en una generación, sino que cinco años por debajo y dos por encima de mí, y por todo el pueblo de Manlleu, se fue corriendo la voz y sabían de mí, sin que yo supiera de ellos. Nadie hizo nada, porque tampoco quise hacer nada, solo caminar y rezarle a dios que me diera fuerzas cada día para que llegase aquel día en que realmente una persona se acercase a mí no por interés, sino porque quiere estar conmigo y ser mi amigo/a o lo que surgiese en ese momento. Tardó más de lo que esperaba, pero llegó después de la libertad, claro está. Aquí está la FLOR DE MI MIEDO MÁS TEMIBLE DE TODOS…

PD. La segunda parte será dentro de 24h.

HR.

HERO&Corporation.

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