Primer Año Marshall

Aunque parezca mentira, ya ha pasado un año después de que Isabel y Edmund dieron el Sí quiero, en su casita racien construida para ellos. No pudieron irse de viaje de luna de miel, lo tubieron que prosponer debido al trabajo de Edmund que le requería un intenso tiempo, todavía no han ido.

Estamos en día Lunes, 4 de Marzo un día realmente importante para esta parejita de casados, porque esta mañana le toca ir al médico a Isabel para hacerse unos análisis, para su chequeo.

ISABEL: Amor mío, ¿Me llevas al hospital?
EDMUND: ¿Al hospital?
ISABEL: Sí, tengo que ir a ver el resultados de los análisis que me hice hace tres semanas, del chequeo rutinario.
EDMUND: Claro que si. ¿Quieres que esté contigo dentro de la consulta? Puedo coger un hueco en el trabajo.
ISABEL: Si, sí puedes estaría muy bien. No debe ser nada del otro mundo, supongo que me dirá que está todo bien. Pero así me harás compañía.
EDMUND: Es mí deber acompañarte, además será todo un placer hacerlo. ¡Vamos, hoy preparo yo el desayuno!
ISABEL: Ahora no te hagas el protector conmigo... pero unos gofres, me apetecen mucho.

[Edmund se dirige hacia la cocina y le prepara unos gofres con chocolate para desayunar, aún queda media hora para que él se vaya a trabajar y solo una hora para la visita que es a primera hora de la mañana. Desayunan tranquilamente, él llama al hospital para decirles que llegará media hora tarde. Mientras en el taxi, no tienen coche sino bicicletas porque son ecologistas]

TAXISTA: ¿Dónde les llevo, señor Marshall?
EDMUND: Al hospital.
[El taxista arranca el motor del coche, y se dirigen hacia allí]
ISABEL: Gracias por acompañarme, edmund.
EDMUND: No me las tienes que dar. Solo hago lo que haría un buen marido con su esposa, y porque te quiero. [Se besan]
TAXISTA: Hemos llegado, serán 25$.
[Edmund paga al taxista, él baja primero y va enseguida a abrir al otro lado para que no tenga que hacer el esfuerzo de abrir la puerta, Isabel baja del auto cierran la puerta, se cogen de la mano, y se dirigen hacia la entrada, el taxi no los espera, así que hace su trabajo. Buscan la consulta, llaman a la puerta y la doctora Nagore Cifuentes les hace pasar.]

DOCTORA: Pasen, pasen y sientense, porfavor.

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