Un año más que ha empezado casi sin descanso, porque en tan solo 19 días ya han pasado muchas cosas, está claro que este año 2022 es totalmente diferente, de nuevo voy a ciegas con el nuevo patrón que se está dando ante mis ojos. Solo hace unos días que me di cuenta cual el la misión que tengo a nivel personal para este año, y como era de esperar no será nada fácil, porque me toca tomar consciencia de todos los recuerdos que tengo de vidas pasadas y anclarlas aquí y ahora, es decir que tendré que pasar mucho tiempo escribiéndolas, porque es la única forma que puedo darme cuenta de lo que sucedió sin dejarme ningún detalle. Supongo que no acepté tener o no me gané el arte sagrado de la palabra escrita simplemente por compartir la palabra de Dios al mundo, pues si así fuese, solo de mis dedos teclearían parábolas que en el futuro se harían grandes novelas a los ojos de aquellos que confían ahora y críticas para aquellos que duden de mí.
Me gané este arte para compartir, pero también para comprender quién soy realmente, quién fui, pues mi memoria recién despertó y tiene espacio suficiente para volver a recuperar todos los recuerdos que no pertenecen a la vida actual. Mucha gente se sorprende, ¿cómo es posible poder recordar algo que hiciste en otra vida, seguro que el cerebro no está preparado para tener tanta información? La energía es el motor de todo movimiento en acción, la red del cerebro es una sinapsis completa que se alimenta básicamente de energía, los recuerdos son energías en acción, porque están sujetas a una emoción que les ayuda a persistir en el tiempo-espacio.
Nuestros cuerpos en verdad no son células que finalmente acaban componiendo un cuerpo físico, pues antes que células, somos energía en forma de átomos y neutrinos que se mueven a través del espacio, en un lugar dónde la frecuencia universal unido a nuestro corazón, marcan las horas del tiempo en el que realmente te encuentras. El tiempo no te controla, cuando comprendes que eres energía en acción, comprendes que el tiempo es solo una energía que se transforma para que de alguna forma tú cerebro entiende qué hacer durante el tiempo en que te queda de vida, puedas hacer algo útil.
Nunca entendí a los mayores cuando de pequeña iba al colegio y veía que todos estaban pendientes del reloj, como si llegasen tarde siempre a la siguiente actividad, permitiéndose así dejarse manipular por algo que ellos mismos crearon desde la energía del corazón. ¡Qué estupidez a veces la humanidad debe caer mil veces en el mismo foso para entender que las cosas funcionan distintas a lo que realmente ven! Quizás cuando una persona peca de cabezón, también es porque el miedo le obliga a repetir el mismo error hasta que tenga el suficiente valor para enfrentarse a él y finalmente cambiar las cosas.
La otra cosa que voy entendiendo más es el miedo, esa herramienta que por tantos milenios la humanidad ha sido manipulada por ello, en los principios de los tiempos, para sobrevivir cuando salías de la caverna y te tenías que enfrentar a un mamut, sabiendo que allí solo podían ocurrir dos cosas, morir o sobrevivir. Luego a través de las creencias sobre el origen de las estrellas, llegaron los dioses dónde se suponía que si les ofendías tenías asegurado la venganza de ellos, más miedo. Y finalmente llegamos a los tiempos actuales, dónde la FE está en crisis y corromperse por traicionar a tú mejor amigo por dinero o simplemente permitir que tú amigo que se ha quedado sin casa, se quede en la calle mendigando, parece el orden del día.
Dicen la multitud que la culpa es de los políticos que solo hacen que robarnos, provocar grandes crisis y enviarnos directamente a la ruina como país. Como ya les dije una vez hace unos años, cuando vemos a la política, en verdad no es más que un reflejo de la humanidad. Es decir, si son corruptos, ¿por qué no piensan en las veces que ustedes mismos no han sido fieles a sí mismos, cuántos de ustedes o cuántas veces han sido capaces de venderse por no respetar un principio que finalmente el principio les nutre y les hace crecer en la FE de su propio universo? Si el presidente del país es un corrupto, piensa dentro de ti, ¿cuándo realmente te traicionaste en uno de tus principios por el qué dirán, el miedo a la vida y al mañana?
He visto personas perder sus casas por no poder pagar las rentas, he visto personas traicionar a sus mejores amigos, familiares, por no aceptar la opinión de los demás, he visto como una vida se acaba ante mí, pensando que era culpa de un crimen que finalmente le envió al suicidio, por no tener el perdón en su interior. Traición a uno mismo, antes le llamaban pecado, ahora principio, y mañana quizás sea tarde para recuperarse si ahora no se perdonen a si mismos, pues el universo no les debe el perdón, son ustedes a sí mismos, porque son ustedes quienes se faltaron al respeto, ni Dios ni sus guías Seres de Luz, ellos siempre nos ayudan a comprendernos.
Ya les dije que Dios no castiga, solo es amor y comprensión, ¿creen que sus hijos no sintieron dudas antes de emprenderse en el camino de la FE? Este camino no es fácil, pues yo comprendí cómo funcionaba, cuando veo mi historia con los ángeles. Cuando era chiquita los podía ver, porque mi corazón era puro (la misma pureza que tenía María al ser aceptada por Dios y aceptar la misión de ser la madre de Jesús, nada que ver con la pureza sexual, la fe te hace puro de corazón).
Pero cuando llegué a la pubertad, en mí corazón empezaron a llegar todo tipo de miedos que me impedían estar cerca de la luz, y caí en las sombras. Me quedé ciega, no les vi más a los ángeles con mis ojos, pero sentía sus presencias a mí lado cada día, a la derecha San Gabriel arcángel (les compartiré dos datos curiosos de él: le encanta las fresas, y se suele cubrir el pelo con su velo rojo), y a la izquierda el Gran Arcángel Uriel (les compartiré dos datos curiosos: le encantan las manzanas verdes, pero también es zurdo). Ellos siguieron a mí lado hablándome, aunque tampoco los escuchaba con sus voces como si hablase con mis amigos, escuchaba como sus palabras entraban directo a mí corazón y escuchaba sus mensajes y sus consejos. Nunca en la noche ni en el día me dejaron sola, de noche siempre he estado custodiada por Gabriel y de día por Uriel. Aún y así, mi fe me permitía seguir viajando a Agartha, quizás tenía miedos y me había apastado de Dios, pero en mi esencia aún era un Ser de Luz encarnado, trabajando para la luz partiendo la jornada media a un cuarto.
Entiendo que los demás piensen que me acerqué a los ángeles porque no tenía amigos a causa del Bullying, pero lo cierto es que el miedo que sentían los otros por mí, era porque en sus corazones al verme les mostraba el amor incondicional, lo mismo que les ha pasado a los demás chelas Seres de Luz que se encuentran actualmente entre nosotros laburando en 3D. Vivir en la gracia de Dios es solo para aquellos que se atrevan a darle frente a sus sombras y aceptarlas con amor, y eso sé de primera mano que no es nada fácil, por eso les entendía.
Cuando cumplí 20 años, me quise enfrentar a mis miedos más oscuros, seguía teniendo mucho miedo a la oscuridad, aunque hacía pocos años que no dormía con ninguna luz encendida, tenía miedo de los posibles ataques de Gämael y sus secuaces demonios. Pero al cumplir una nueva década, tuve que dar frente a mis miedos, porque la vida que estaba viviendo no era para nada a la que sentía de corazón que tenía que ser así. Tenía tanto miedo, que Gabriel y Uriel para calmarme me dieron un obsequio que adoré toda mi vida, después de la prueba que les pedí si eran ellos, como vi que lo eran, ellos simplemente me dijeron una tarde de verano del año 2013…
URIEL: Durante las próximas tres noches, tus ángeles y yo personalmente pasaremos una noche contigo. Solo por tres noches, podrás sentir nuestra presencia físicamente, solo deberás cumplir con una norma.
LAIA: ¿Qué norma?
GABRIEL: Deberás prometer que no abrirás los ojos en ningún momento, si lo haces, vamos a desaparecer y no volveremos a presentarnos físicamente ante ti pasado un largo tiempo.
LAIA: De acuerdo, les prometo que mantendré los ojos cerrados.
Durante la primera noche, me fui con muchos nervios, no sabía qué ocurriría, ni tampoco sabía el nombre de qué ángel vendría a verme, pero solo podían ser ellos dos. Así que me puse el pijama, me tumbé en la cama y finalmente le dije buenas noches al ángel que ya estaba en la habitación y notaba que así era, y cerré la luz pequeña. Estaba algo nerviosa, por eso me mantuve mirando el techo por un buen rato, en silencio, sin pensar en nada, solo escuchando el silencio de la casa y de mí habitación. Aunque estaba oscuro aún no había cerrado los ojos, hasta que me acordé la promesa y los cerré, de fondo escuchaba latir el corazón algo rápido, pero tenía tantas ganas de sentirlos, que ni me percaté de nada más que me puse consciente de la habitación, sin abrir los ojos en ningún momento.
No pasó mucho tiempo cuando escuché que alguien estaba caminando por mí habitación, el sonido no parecían de unos zapatos normales, no eran unas zapatillas deportivas, ni tan solo las de estar por casa, se escuchaba que la suela era de cuero, se notaba el pequeño ruido que hacían cuando toca el cuero con la piel. Esos pasos provenían de la ventana y se estaba acercando a la cama lentamente, hasta que finalmente se me quedó a un metro de la cama, escuché la respiración profunda por la nariz y la voz de Gabriel dijo “¿Lista?” y yo simplemente dije que si con la cabeza, y él empezó a reírse y me dijo “no tengas miedo, mi amor. No va a pasar nada malo, yo soy un ángel de luz, yo siempre te protejo, soy tú protector, lo menos que quiero es lastimarte, yo siempre te he cuidado mucho, mi amor”.
PD. Dentro de 24h tendrán la segunda parte.
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