jueves, diciembre 05, 2019

Motores En Marcha


¡Y al fin llegó diciembre! ¿Cuántos de ustedes están contentos de que ya se termine el año? Pues siento decirles que yo soy de aquel tanto por ciento que no quiere o no estoy preparada todavía para dejar atrás el año. ¿Se hacen una idea de porque? Es cierto que el año que he vivido, ha sido increíble, ya les comenté en el video de hace unos días en el canal de youtube, pero el motivo real, es simple… el YOSOY está acá a la vuelta, y digamos que tengo algo de respeto por esto, aún me quedan cosas por terminar, antes de que llegue. Pero según dicen los guías, los motores ya están en marcha.

Estas semanas tengo muchos sentimientos encontrados, la gran mayoría no tienen nada que ver con lo que ya ha pasado, no en este tiempo, más bien tienen que ver con el 2020 que tiene una estrecha relación con lo que hace 12.000 años se decía el proyecto Ater Tumti. Me siento preparada y estoy preparada para hacerlo, tengo todas las herramientas listas, preparadas para el pistoletazo de salida y empezar estos dos años de misión. Los guías me han estado preparando durante los últimos siete años más en profundidad, pero fue a partir de los 11 años cuando pude recordarlo, y acepté seguir y terminar lo que dejé. 


Y eso quiere decir que también acepté, volver a recordar todos los motivos de porque se dejó inacabado. Esos sentimientos, inevitablemente en aquel tiempo fueron tan traumáticos que sin querer mí alma las clasificó como un trauma, por eso, hoy después de tanto tiempo, vuelvo a llorar, reír, preguntar… igual como si el tiempo no hubiese pasado, porque a pesar de que la tecnología se acerca mucho, todo lo demás es exactamente igual. Pero no tengo miedo, ni voy a permitir que me limite, sigo acá día a día terminando lo que empezamos. Superando todos los problemas, juntos. 

La única diferencia que le veo, es que con todo este tiempo, todos los que estamos involucrados en cierto modo en esto, hemos tenido el tiempo y las vidas suficientes para poder evolucionar, y si la cagamos en algún punto, esta vez, podremos hacerlo mejor. Porque ya lo dicen los maestros, siempre se puede volver a empezar. Lo que no estoy dispuesta es a esperar otros 12.000 años para terminar definitivamente con todo esto, ¿saben por qué? Básicamente, la vida en el universo es muy larga, y creo que dentro de tanto tiempo, me encontraré fuera de Gaia… visitando de nuevo otros mundos y empapándome de otras civilizaciones, aportando mis granitos de arena en otros proyectos. Aunque Gaia siempre está en mí corazón, también tengo ganas de volver a ver más vida, más allá de las estrellas. 

Llevo trabajando para Gaia, desde sus inicios, se puede decir que yo la vi nacer, aporté mi granito para fomentar la creación de los cuatro reinos, por los cuales colaboré en tres de ellos. Vi como crecía y poco a poco formaba ciudades, reinos, guerras y cruzadas… lo vi y formé parte de ella, en cuanto apareció el final de la era Atlante, antes solo era una mera espectadora y colaboradora del otro lado, de las dimensiones superiores, entre 9D y 6D. Hace 77 vidas que decidí encarnar como humana y aportar así mi granito formando parte de la montaña. Aprendí directamente a ser humana, apreciar mí hogar, mi familia, y todo aquello que compartía o me quedaba para mí. Vine tanto como mujer como hombre, también antes de Atlántida pude encarnar como lobo de montaña, una especie que ya no se encuentra en 3D, pues reside aguardada en los Sistemas de Agartha en 5D, fui un árbol y un diamante… pero lo que más he sido, es SER un HUMANO. 

Las esferas mayores dicen que para completar todas las materias en Gaia i formarte como un HUMANO, tienes que haber encarnado un mínimo de 77 vidas, y a partir de aquí, empiezas a colaborar con el plan divino de una forma más consciente. Como ya les dije, este es mí plazo… y como ya han visto en la serie y seguiré mostrándolo, la vida que llevo está al 100% enfocada a la consciencia planetaria y al plan divino para Gaia. Yo aún no estoy segura, pero creo que o ya me gradué de HUMANO o estoy a puntito… porque siento que a la que termine esta encarnación, voy a volver pero como ser de luz de 5D. De todas formas, esto está por verse todavía, así que no pongo la mano en el fuego, porque no quiero quemarme, pero tengo fe que este es mi destino.

Cuando empiece el YOSOY, el cambio que tanto espera la sociedad, al fin dejará de expresarse para poder experimentarse. El tiempo que llevamos los que trabajamos para la consciencia planetaria, sabemos que Gaia se ha tomado su tiempito para expresar qué quería hacer, si cumplir su destino o dejarlo así… suerte que ha tenido sus consultas ajenas a este mundo para poder saldar sus dudas, y al final ha decidido cumplir con su destino, aceptando su responsabilidad, por ende a nosotros, nos toca aceptar la responsabilidad del camino que hemos elegido transitar. Nosotros, los trabajadores de la luz estamos acá, porque nuestros procesos de despertar y fomentar el despertar se hicieron mucho antes, porque aquí y ahora podamos encaminarnos hacia lo que realmente hemos venido a hacer aquí, en parte a disfrutar y aprender, pero este contrato tiene una letra muy chiquita que dice, que tenemos que ser faros de nuestros hermanos que en estos momentos están despertando la consciencia y así ayudarles a encontrar su destino. Dependen de nosotros, al igual que nosotros tuvimos la ayuda necesaria en su momento, algunos (como yo sin ayuda de 3D, pues los guías siempre nos han ayudado a encontrar sentido a lo que venimos a hacer), y otros de los primeras velas que encendieron este cambio de consciencia y que ahora permanecen en el otro lado, esperando volver. 


El camino del YOSOY es la forma que todos los trabajadores de la luz, tenemos para comenzar nuestra parte final de preparación para lo que se viene, es tiempo de emprender un camino físico, para recuperar las partes que se perdieron en su momento, para reconocerla y saber que esas partes, forman parte de uno mismo. Así sencillo de explicar, significa que tenemos que ir en busca de las respuestas que nos planteamos cuando en algún momento del inicio de nuestras vidas pasadas, nos preguntamos < ¿Quién soy?>. Esas respuestas no llegaran a nosotros desde casa, inevitablemente hay que emprender un camino físico, para enfrentarse a lo que menos queremos enfrentarnos, a uno mismo. Sé que suena la batalla que jamás podremos vencer, pero es necesario.

En mi caso, intentaré seguir mi destino y quizás me vean en redes viajando a lugares increíbles, pero lo que sí que me va a pasar, es que cuando viaje a esos lugares, voy a recordar mucho más quién fui en otras vidas. Actualmente recuerdo solo el 60% de todo lo que fui, y en la gran mayoría de vidas, son escenas sueltas que no consigo encontrar las piezas de este rompecabezas gigante para ver si algo encaja o no. Hace un año, antes de irme a Cuba solo recordaba el 30%, cuando buscaba las piezas, un guía me dijo “lo que buscas no lo vas a encontrar dentro de una caja vieja en el desván, tendrás que recorrer el camino de vuelta para encontrar las piezas que dejaste allí a fuera”. Él mismo me recordaba que me había dejado esas piezas fuera de mi casa, de mi zona de confort, para recordar que debía romper con todo e irme a la aventura. 

En San Pedro De Las Rocas (Cuba) lo vi super claro que el guía tenía razón, porque fue llegar allí, en lo alto de la socapa, ver esa fortaleza que está a poca distancia de la ciudad de Santiago De Cuba, y empezar a recordar que yo ya había estado allí en otra vida, concretamente en 1559, en el comienzo de la conquista de las Indias, junto a Cristóbal Colón. Allí recuperé tres piezas del rompecabezas, que me llevaron al siguiente punto, Girona (Cataluña, España) y allí encontré diez piezas más, que me llevaron al siguiente punto Roma (Italia), allí encontré ocho piezas más, que me llevaron al siguiente punto Arenys De Mar (Barcelona, España). Luego Barcelona, Vic, Montserrat, de nuevo en Barcelona, Arenys de Mar, Montserrat, Santa Eulária Des Rius (Ibiza, España) y finalmente Olot. 

Quizás la gran mayoría ya haya estado allí millones de veces en esta encarnación, pero cuando estás en el tiempo adecuado para recibir la información adecuada, todo cuadra, solo el guardián de 8D (Registros Akashicos) sabe cuándo te tiene que dar esa información y dónde. Y esto es así, porque la Orden de la Biblioteca Universal lo manda de esta forma. 

Puede resultar algo maravilloso pensar que hay que viajar para comprender el recuerdo de otra vida, pero la verdad es que da miedo, porque recordar a veces puede ser peor que jugar a la lotería. Porque solo te dan las indicaciones de que hay que ir a tal lugar, los recursos van de tú parte, pero la ayudita llega del otro lado, mientras vas, la incertidumbre avasalla tú corazón y tú mente con un montón de preguntas y miedos que llegan sin previo aviso, hasta que le tienes miedo a lo que el guardián de 8D diga o mande, nada más bajar del avión. 


Por eso recordar todavía no todo el mundo lo puede hacer, porque para poder saber quién eres, hay que aceptar antes tus responsabilidades en este planeta, sin ellos, no llegará nada. ¿A quién quieres engañar, eh? Los guías saben, si estás o no preparado. A pesar que quizás hiciste un pacto de dar fechas límites para ciertos momentos en tú encarnación, siempre que se acerca una de ellas, vas a ver, como un guía te pregunta algo y la respuesta de esa pregunta dependerá de si lo acordado sucede o no. Yo vine recordando ciertas cosas, pero recuerden lo que me dijo Anasiel “todo eso lo vas a tener que olvidar, para más adelante volverlo a recordar” realmente quería decir que no era el tiempo ni tenía las aptitudes correctas para poder aceptar recuerdos de otras vidas, y lo olvidé por un tiempo. 

Este camino necesitarás ser fuerte, valiente, tener valor y tener inteligencia emocional, porque te vas a conocer a fondo, ya que en algunas ocasiones vas a realizarlo solita, y en otras acompañada. Pero es mi vida, mis recuerdos y mi camino, nadie más que yo misma puede volver a caminar por esos mismos pasos que caminé hace millones de años atrás. Por lo tanto, acepto este viaje y acepto toda responsabilidad que haya en ella. 

PD. El Capítulo de la serie será el Viernes 6 de Diciembre del 2019.

Recomendación: Enya – Trains and Winter Rains.

HR.

HERO&Corporation.

sábado, noviembre 30, 2019

El Espejo De Mi Vida - Capítulo 4


El día de mi cumpleaños fue un día denso y raro, en el colegio cuando Vicky se enteró que era mí cumple, por costumbre la cumpleañera tenía que hacer su corona de cartulina con pegatinas y lo tenía que llevar en la cabeza durante todo el día. Adoraba ese día, porque siempre fui la mayor de las chicas, era la primera en que cumplía años… y hacer esa corona, aunque las manualidades no me gustaban demasiado, esa me encantaba. Llegué a clase con una sonrisa de oreja a oreja, pensando “voy a hacer la corona en medio de la clase… Yuhu…” pero al ver que las clases eran como siempre, y Vicky no decía nada de la corona, cuando faltaban minutos para el recreo, la profesora se dirigió a la clase…


-          ¡Hoy tenemos que felicitar a la Laia que es su aniversario!- todos me felicitaron aunque la cara de amargada que hacía la profe parecía más todo lo contrario.- ah por cierto Laia, tú te quedas sin recreo, te quedas aquí a hacer tu .- dijo.

-          ¿Qué? ¿Me castiga?- le dije sin saber porque.

-          Si.- es lo único que dijo.

¿Cómo se le puede negar a una niña de 4 años ir al recreo sin motivo con la excusa de hacer su corona de cumpleaños? Sigo sin entenderlo tras el paso del tiempo… pero Uriel y yo nos quedamos sin recreo para hacer la puñetera corona que ya no me apetecía hacerla. Si me pasase ahora, le mandaría la mierda y me hubiese ido al recreo y luego ya lo hubiese hecho… ¡Qué gente, eh! ¡Dios! 

Fue extraño notar la soledad de la clase, solo la presencia de Uriel animaba ese silencio, mientras que él pegaba circulitos de colores, al no haber nadie, le permití ayudarme, si alguien lo hubiese visto, seguramente que me hubiesen llamado loca porque hubiesen visto los objetos moverse solos sin motivo. ¡Qué risa me entra nada más pensarlo! En algunas ocasiones, se lo permito a Uriel y mola ver como lo hace, claro que para mí no vuelan los objetos solos. 

-          Ya tengo 4 años, ¿Cuándo va a ocurrir aquello que dijo Anasiel?- le pregunté.

-          Mi amor, todo llega, siempre llega.- contestó con mucho amor.

-          Estoy curiosa, Dary…- le dije.

-          Quizás sea el momento de darte mí regalo ahora…- comentó, rebuscó en su bolso, igual que el de Anasiel pero en rojo, y sacó un paquete mediano envuelto con un lazo rojo.- ¡Feliz cumpleaños, mi amor!- dijo entregándome el regalo que acepté.

Deshice el lazo que era de terciopelo y lentamente el papel de regalo que era un trapo se desenvolvió solo, mostrando así dos libros viejos pero bastante gruesos. Miré los títulos:

1.       Reinos de Gaia

2.       Humanidad

Parecían dos volúmenes de coleccionista para adultos, la letra era pequeña y no tenía dibujos, eran dos libros como los que leía mi madre cada noche antes de acostarse.

-          Dentro de un año, empezarás a ir por la noche a una escuela llamada IÓN (zona encarnada) dónde te van a terminar de preparar para que aprendas las cosas de esta encarnación por antelación. Mientras tanto, entre Anasiel y yo te vamos a preparar para que estés lista para esa escuela.- su cara de ilusión era más grande que la mía, le di un abrazo ya tenía ganas de empezar.

Sé que puede parecer mucho, pero para mí era lo ideal, me sentía preparada por esas clases particulares con mis guías, ya saben que Uriel no autorizaba nada (ni ahora lo hace) sino me veía preparada para hacerlo y después de consultarlo con todo el grupito de Seres de Luz que trabaja conmigo. 

-          Mañana mismo, cuando te vayas a acostar, vas a aprender a meditar para que con el tiempo consigas doblarte en el tiempo-espacio y luego más tarde puedas hacer como nosotros, viajar entre las diferentes dimensiones.- informó Uriel.

-          ¿Por qué no hoy?- le dije ansiosa.

-          Porque hoy, te hemos preparado una pequeña fiesta de aniversario, es tú día, no te queremos estropearlo, debes aprender a festejar cuando toca.- dijo entre carcajadas que yo también expresé.

A partir de ese momento, mi vida tomaba un rumbo distinto, Anasiel tenía razón, ahora tenía dos vidas en una que eran necesarias para lo que había venido a hacer. Fue cuando empecé a tener problemas de sueño, hasta ese momento, de noche podía descansar, pero esas “vacaciones” de integración ya habían terminado y tenía que aprender cositas importantes, por eso de día seguía en la escuela el Carme Vedruna, aguantando a la profe de P4 y de noche, con Anasiel y Uriel aprendiendo sobre la historia de la humanidad, desde su creación hasta su propósito actual y el equilibrio de los cuatro reinos: Animal, vegetal, mineral y humano. 

Así fueron mis inicios como alumna dimensional, y de hecho gracias a esto, he conocido a gente muy importante y he tenido al alcance de mi mano a un gran conocimiento, que me he preparado para la misión que ya se inició en la actualidad. Quiero que queden claro estas dos vidas distintas una a la otra, para que no se hagan un lío, recuerden dos vidas en una sola.

Ese verano empezamos a veranear en Sitges, gracias a que uno de mis tíos, su pareja tenía unos terrenos allí en medio de la naturaleza y ese lugar me ayudó a comprender la terminología reinos que se organizaba Gaia (dejé de llamarla Tierra). Porque allí cohabitaban los cuatro reinos en tres terrenos y una cabañita de madera muy hermosa e humilde. Durante el mes de Agosto, estuve allí casi “viviendo” pero como siempre había gente de mi familia… entre ellos mí tío Hilario, con él le podía preguntar dudas que no entendía de las dos “materias” que impartía con Uriel y Anasiel, él era el “profesor de apoyo”. 


Una mañana que había salido el Sol hacía nada, él me sacó de la cama para irnos a la parte más alta, cerca de la puerta de salida, porque los terrenos hacían cuesta abajo, para ver la magia del primer rayo de Sol directo que salía tras una pequeña montañita que nos apartaba bastante de la civilización. 

-          Un buen equilibrio, entiende que el primer rayo del Sol es la esperanza y su sombra su libro, y tú la pluma con la que vas a escribir tú historia.- dijo.

-          Titi, ¿cuál es mi historia?- le pregunté.

-          Cierra los ojos e imagina, y cuando lo tengas, abre los ojos y obsérvalo a fuera.- explicó, sus enseñanzas eran muy poéticas y hermosas aprovechaba cada momento para aprender de él, el único que tenía en 3D y en mi familia. 

Esta era su forma de decirte “todo lo que eres, ya eres tú propia historia, solo debes escribirla para ser creada”. El momento de escribir, la estás imaginando y cuando terminas de escribirla, la ves a fuera. 

-          ¿Y cuál es tú historia?- le pregunté.

-          Observa en mis ojos y verás el reflejo.- contestó.

Le miré a los ojos y tras hacerlo, en un momento en que estábamos a solas, sin familiares ajenos a todo esto cerca, de su espalda salieron dos alas gigantes blancas hermosas. Me quedé impresionada.

-          ¿Eres un ángel?- le dije.

-          Mi nombre es Humiel (Arcángel Salvador), y pronto voy a regresar a mi estado original.- contestó.

Dicen que los ángeles no tienen alas, quizás no lo hayan experimentado o algo les distorsiona su verdad, pero yo todos los ángeles que puedo ver, muestran sus alas en algún momento. 

-          ¿Por qué estás aquí?- le pregunté curiosa y feliz, de hecho me había acostumbrado tanto a estar rodeada de ángeles que ver a tú propio tío que es uno, era como si la unión con el mundo angélico realmente no fuese tan separado como se puede comprender al principio.

-          Vine por tu madre, soy su ángel guardián, de la misma forma que tienes a Uriel. Pero encarné, porque ella todavía no puede verme así, de la misma forma que tú lo haces. – un suspiró interrumpió sus palabras, me miró a los ojos con la bondad más pura y prosiguió.- también estoy aquí por ti.- dijo.

-          ¿por mí?- pregunté sin querer, él solo lo confirmó con la cabeza.- ¿por qué?- le pregunté.

-          Muy pronto el mundo que conoces va a cambiar de una forma que nada de lo que ahora ves, solo serán recuerdos. – se detuvo y me tocó el corazón con el dedo índice.- solo esto, va a poder ayudarlo para que no se desvíe del camino por el cual ya está destinado a cumplirse.- dijo.

No entendía la relación de mí corazón con el mundo, que a esa edad todavía no sabía si la Tierra era tan grande como parecía escuchar a los demás seres de luz, tan solo era una niña de cuatro años que intentaba crecer, pero esas palabras no parecían una forma de no quitarme la ilusión de seguir creciendo, más bien, las interpreté de la forma que estaban relacionadas con las palabras de Anasiel y Uriel. Si el mundo iba a cambiar, y mi corazón tenía que ser la herramienta para ayudar a la Tierra, empecé a comprender más la preparación que había empezado antes de empezar de verdad, con lo que mis guías decían tú propósito de vida.

-          Mantén el corazón así de puro y tú visión será el cambio que este planeta va a tener que vivir.- dijo, no me asustaban sus palabras, solo notaba un peso, por así decirlo encima de mis hombros, no me había dado cuenta de que eso era la responsabilidad que ya desde aquel momento formaba parte de mí.

-          ¿Mí corazón puede cambiar el mundo?- le pregunté.

-          Tú corazón VA a cambiar el mundo, pero hay más niños y niñas que ya están colaborando con esto.- terminó de decir.

No le pude preguntar más, porque en ese momento llegó mi madre y nos pusimos a jugar a cositas, para disimular. Pero sus palabras me dejaron bastante interesada, pero a la vez con miedo ¿qué pasaría si en algún momento mí corazón dejase de ser puro? ¿Qué le pasaría al mundo entonces? ¿Por qué mí corazón es tan importante para el mundo? 

La estancia en Sitges me dieron unas vacaciones diferentes a las de Cadaqués, al tener todos mis tíos refugiados en ese lugar tan mágico que parecía de cuento, y tener además a mis primos, que de parte de mi madre somos muchos, pude compartir con ellos la felicidad que sentía al estar con toda la familia, jugando, comiendo, contando cuentos, experimentando en la naturaleza e ir a la playa todos juntos. Aunque no pensaba que ese eran el inicio de las vacaciones de mi infancia, pensaba que quizás era el único año que podríamos estar allí de esa forma, mostrando y sintiendo la felicidad fluir por todo nuestro cuerpo.

Por primera vez la familia estaba toda reunida, ya que la gran mayoría de mis tíos y mis primos viven en el Prat de Llobregat, una ciudad al lado de Barcelona, curiosamente dónde está el aeropuerto. Me di cuenta de que efectivamente era la más pequeña de más de veinte primos de todas las edades, desde cuatro hasta los 25 años, incluso algunos ya estaban a punto de casarse y emprender sus vidas. Pero entre nosotros, en realidad no existía la diferencia, me llevaba como mucho cuatro años con el primo que nació antes que yo y muchísimo comparado con mi primo José, el más mayor de todos. En realidad solo éramos tres chicas, el resto chicos, algo extraño pero no importaba, porque nadie jugaba a los roles que veía en clase, es decir, que los chicos no solamente jugaban al futbol, tenis, al escondite o cualquier juego que era propio de los niños, y las chicas jugasen solo a muñequitas y a cosas de princesitas. Todos jugábamos a cualquier cosa, sin especificar roles, porque entre nosotros no existen las diferencias, todos somos iguales.


Ellos me enseñaron a nadar, jugar al futbol, tenis, ping-pong,… mientras que yo les enseñaba a respetar a los animales más chiquitos, allí fue cuando me empezaron a fascinar las hormigas y su sistema de comunicación y organización, todos trabajando para todos, unidos entre sí para ser solo UNIDAD. Dónde normalmente viven, no tenían tantas vistas de tantas especies de animales que en realidad hay, aunque no sabía muy bien qué eran, les enseñé a observarlas de tal forma que cualquier animal pudiera mostrarse sin miedo a ellos. Cada primo tenía algo que aportar a la unicidad que creábamos juntos, era mágico. 

Además que formar parte de esta familia es enfrentarse a lo que yo algún día quería ser, y era no perder jamás el humor y las ganas de seguir caminando. Esta familia me enseñó muchas cosas durante toda mi infancia y ahora ellos siguen aprendiendo conmigo cada día, por eso, los amo con todo mi corazón.

Recomendación: Serie Creedme (Netflix).

HR.

HERO&Corporation.

domingo, noviembre 24, 2019

El Espejo De Mí Vida - Capítulo 3


Anasiel me escuchó con ambas orejas atentas, parecía que el origen era el recuerdo, algo había quedado y esperaba conservarlo…

-          Todo esto lo vas a olvidar, solo por un tiempo…- dijo a mí me dejó totalmente sorprendida, miré hacia arriba y en ese momento escuché el ruido de una cámara, miré y era mi padre que ni sabía que estaba allí, haciéndome fotitos.- Tranquila, él no me puede ver…- comentó Anasiel.

-          ¿Por qué?- pregunté.

-          ¿Qué miras hija?- decía mi padre… intentando captar la atención para hacer otra foto, le ignoré.

-          ¿Por qué debo olvidarlo, esa soy yo?- le volví a preguntar.

-          Claro que fuiste todos ellos, pero para que todo salga como debe ser, tendrás que olvidar y reaprenderlo todo de nuevo.- contestó.

No lo entendí, pero si lo decía era porque debía ser de este modo y solo podía seguir sus indicaciones. Mi padre se olvidó de mi, al ver un pájaro cerca del auto y le intentó hacer una foto, pero se le escapó y en su lugar Anasiel le dijo algo al gato y el gato se fue con mi padre… que solo le empezó a hacer fotos, intentando gastar el carrete (¡qué tiempos aquellos! Cuando las fotos estaban contadas, un carrete de 24 fotos era el máximo para unas vacaciones, eso impedía que mi padre tuviese rienda suelta a su profesión frustrada como paparazzi, ahora me tengo que tragar mil fotos de cualquier cosa). 

Anasiel se aparecía bajo ese árbol cada mañana casi a la misma hora todos los días que estábamos allí veraneando, aproximadamente unas dos semanitas a mediados de Agosto. Cada día que pasaba, me contaba más sobre el gran cambio que sufriría al cumplir 4 años, él estaba autorizado a contarme los inicios de este camino y con eso conllevaba a explicarme la 5D concretamente, me contó qué era Agartha.


-          La vida no solo existe en esta tercera dimensión, sino que dónde nos encontramos, hay hasta nueve dimensiones, dónde existe vida y más allá.- explicó mi atención era plena, sus historias me llenaban mucho la curiosidad, me sentaba en su regazo y quería escucharle todo el día, quizás la historia era un poco para “adultos” pero a mí me iba como anillo al dedo, siempre vieron en mi la maduración que no se podía apreciar físicamente pero si mentalmente, incluso los profesores en clase lo veían…- cada planeta que ves en las películas, existe vida, hay mucha vida allí a fuera – señalizó el cielo azulado de ese día- de muchos colores, aspectos y civilizaciones, lo que ocurre es que la humanidad todavía no acepta esto pero pronto empezarán a hacerlo.- dijo con un amor gigante.- ¿De dónde crees que vienen los ángeles y los guías en realidad?- me preguntó.

-          Uriel me contó que los guías vienen de la 4D, y los ángeles… de algo que le llaman Dios- contesté.
Anasiel volvió a reírse y yo le seguí.

-          ¿Qué es para ti Dios en realidad?- me preguntó.

Me lo quedé mirando sin poder contestar, porque no tenía nada para contestar.

-          Ya comprendo.- comentó.

Del bolso que siempre dejaba a un lado, agarró una pequeña Bola de cristal, me la mostró yo me quedé fascinada, nunca había visto ninguna. 

-          ¿Y el Universo?- me preguntó.

-          Es el lugar dónde existimos.- le contesté.

-          Algo así, querida.- comentó.- imagina que esta esfera es en realidad todo el universo, dónde dentro existe todo tipo de vida que puedes llegar a imaginar, y entre ellos, tú y yo- dijo.- y fuera de esta esfera no existiera NADA.- marcó una pausa por si me venía alguna pregunta como vio que no, prosiguió.- toda esta esfera se llama MATRIZ y en ella todo es posible, como la vida, los errores y el amor. En ella nos sujetamos, porque dentro de ella, se puede decir que existimos, porque el universo es un lugar creado por creadores. ¿quién crees que son aquellos creadores?- me preguntó.

-          ¿Dios?- le dije.

Anasiel de nuevo volvió a reírse de la situación.

-          Los creadores no es solo una sola persona, sino aquellos que sujetan una imagen con tan solo pensarlo, porque toda creación parte de un SUEÑO.- contestó.

-          Entonces, ¿Por qué dicen Dios? O ¿Qué es Dios?- le pregunté.

-          La humanidad durante eones ha creído que todo lo que les pasa es porque “alguien” que no es humano, ha querido guiarlos así… pero lo cierto es que una persona cuando cree que alguien le dice qué debe hacer, es porque ha olvidado algo muy importante.- dijo.

-          ¿El qué?- dije curiosa.

-          Que ellos también son creadores de este universo.- contestó.

Me impresionó bastante su lección, la iaia siempre ha sido muy creyente, de misa todos los domingos, y hablaba de Dios bastante, y Anasiel clavaba todo lo que la iaia decía, la diferencia era que la iaia había olvidado quién era y Anasiel era un creador. ¡Increíble! 

-          La palabra Dios, se le da cuando uno no reconoce que también ES UN CREADOR. Pero en este universo tenemos una persona que “gobierna” toda esta creación y se le llama DIOS, porque es un trabajo, ¿entiendes?- dijo.

Por lo que dice, lo aclaro por si acaso, es que las religiones han intentado tergiversar la palabra de DIOS separando el humano de su misión de CREADOR, ya que todos gozamos de esta particularidad, por eso los artistas están siempre en contacto con el universo y alguien que tenga un trabajo en una empresa cualquiera haciendo cuentas o cualquier cosa, pierde su “humanidad” al dejar de ser un creador constante una fuente divina él mismo. Y el DIOS que tergiversan en las religiones, en realidad sería como el “presidente” del partido Universal Creador, o sea solo un título no un nombre ni una persona que hace todo a su antojo, tiene sus reglas esto.

Con cada lección de Anasiel, un gran mundo se despertaba ante mis narices, ya no era Laia Galí Garcia, una niña que podía ver ángeles y guías, que iba al colegio a aprender a leer y a escribir, sino que la vida es mucho más y tan grande que a pesar de que me sentía a veces tan chiquita, poco a poco me sentía una creadora más de este universo. ¡Wow! ¿Cuántos niños de casi 4 años habrán podido estar al contacto con esta información tan divina? Me sentía a veces privilegiada, pero enseguida me daba cuenta de que formaba parte de un TODO así que tan privilegiada no era.

Llegó setiembre y volví al colegio esta vez me tocaba P4  en la clase C, junto a una profesora que no encajamos demasiado bien des del principio, lo curioso es que se llamaba igual que mi madre Vicky (diminutivo de Victoria). Con el inicio de este curso, llegaron siete compañeros nuevos, uno de ellos me llamó mucho la atención, se llamaba Xevi, aunque no encajé con él casi nunca, siempre estábamos peleándonos todo el rato, y a veces sin motivo, me llamó la atención igual. Cuando Uriel proponía jugar a los puntos de vista, me quedaba horas y horas observándolo, me fascinaba su punto de vista de su realidad, él jamás supo porque le miraba tanto, pero fue el primero que se me quedaba mirando al mismo tiempo que yo y me decía “¿Qué me miras tanto?” y yo por vergüenza y respeto, miraba por otro lado, pero luego volvía a observarle. 

No, no me atraía, solo me asombraba su historia, con el tiempo Uriel se dio cuenta y un día en clase empezamos a hablar de él.

-          ¿Qué te pasa con él?- me preguntó Uriel.

-          No lo sé, pero es como si sintiera su dolor ¿Por qué?- le dije.

-          Cuenta- dijo curioso Uriel.

-          Cada vez que lo observo, siento acá – en mi corazón señalé- como sufre, está muy triste, porque no entiende el conflicto que tiene en casa, siendo el pequeño de cuatro casi cinco hermanos, y sus padres separados en varias ocasiones… él sufre, y mucho…- dije.

Uriel se quedó mudo, y me abrazó por encima de mis hombros, no sabía porque pero parecía feliz.
-          ¿Qué pasa?- le dije.

-          Nada. Estoy contento porque empiezas a empatizar- comentó yo me lo quedé mirando sin entenderlo.- que empiezas a ponerte en la piel del otro, eso te va a servir mucho en el futuro, ya lo verás…- dijo mientras sacaba el pergamino para anotarlo.

Todos los avances que hacía Uriel tenía que anotarlos en el pergamino, parecía que querían tener todo anotado para saber cómo iba mi evolución, ver a un arcángel escribiendo en pergaminos antiguos, con tintero y pluma es algo que siempre, incluso al día de hoy, me resulta gracioso y muy interesante. Pero Uriel es el Arcángel de la escritura, y tiene por costumbre escribir en pergamino, y usar bolígrafos o lapiceras como que no le va, y además no le gusta, así que es como volver al pasado cuando lo veo haciendo eso incluso en la biblioteca cuando vamos a estudiar.

Una de las compañeras nuevas que conocí en ese curso enseguida jugábamos en el patio, pero por motivos que desconocía después de clase no quedaba con ella, por eso la consideré una amiga del colegio pero no fuera de él. Hasta que un día tras las vacaciones de navidad, ella no regresó y no supe nada de ella… de nuevo, otro que se le había tragado la Tierra y sin previo aviso, de nuevo sola ante esa clase extraña… pero divertida, los chicos empezaban a hacer de las suyas, que al menos te hacían pasar lindos ratitos de risas, como Nil y Aleix… una unión fantástica de amistad (entre ellos dos hablo) yo empezaba a admirar su tipo de amistad, que yo quería tener y no había forma… 

La cultura musulmana siempre la tuve mucho a la vista, ya desde P3 habían venido varios compañeros ya nacidos en Vic, pero buenos chicos y amigos de colegio, aunque en el patio no se veía que fuesen amigos… cada uno en el patio hacía lo que deseaba… yo con Uriel, siempre. 

Pero P4 recuerdo que fue un curso muy difícil para mí, porque la profesora no parecía que colaborase mucho, fue la primera vez que alguien tenía en contra sin haber hecho nada. La Vicky me puteó tanto como le vino en gana durante todo el curso, provocando así que mi problema al hablar, que no mejoraba mucho, fuese fruto de desprecio e intolerancia hacia ese curso. Que la propia profesora incitar al odio a mis compañeros para que me incitaran al odio a mí, ya era el colmo… yo solo seguía lo que decía, aprendíamos a escribir el abecedario en catalán, ya era calladita de por si, por eso intentaba molestar lo menos posible, pero eso no parecía funcionar para ella, intenté comprenderla, pero sentía en mi corazón un sentimiento que me dolía mucho a mí, tanto, que me hacía llorar. 

-          Dime, ¿qué es lo que sientes de ella?- me decía entre los brazos de Uriel, casi al borde de la inundación por llorar tanto.

-          Es como si alguien muy importante, se hubiese ido para siempre y tuviera fuego en su garganta.- es decir, sentía que le habían abandonado de pequeña su padre y sentía odio por ello.

Ni idea si era cierto o no, pero ese sentimiento era muy fuerte, Uriel al final decidió ser como de escudo mientras que Vicky intentara hacer algo conmigo. No funcionó mucho, pero… ya no lloraba tanto, seguramente que ya no notaba tan fuerte su dolor, nunca se lo compartí. 

Recomendación: Rosalía - A Palé.

HR.

HERO&Corporation.

¿Un Demonio Siempre Ha Sido Malo?

  ¡Feliz año a todos! Dejamos atrás el año del infinito (2+0+2+4=8) y nos vamos centrando en el año de la divinidad (2+0+2+5=9). El año pa...