Este fin de semana por Barcelona, he recibido una señal
divina que me ha llamado mucho la atención, y es la siguiente “escucha el
silencio”. De hecho hace meses que disfruto más estar sola que estar con
personas, a lo largo de la semana estoy bastante en conexión conmigo misma,
hablo con la gente que me rodea, no soy huraña, pero últimamente me gusta el
doble irme a dar la vuelta sin la compañía de nadie.
Hace meses que me gusta desaparecer durante días y volver
para enfrentarme a la verdad de la realidad que me tiene anclada en esta parte
que a veces carga tanto que en ocasiones piensas en dejarlo todo y en
desaparecer, y yo últimamente lo hago, evitando la situación en casa, o cuando
el camino no me dice las esperanzas soñadas que están empezando a desaparecer,
y cuando me siento así, desaparezco y ya me puedes buscar, que allí dónde voy
nadie me puede encontrar.
Puedo irme de Manlleu para viajar durante un fin de semana a
Barcelona, puedo irme unas horas y esquivar la civilización para sentirme yo en
el mundo. Me siento así, cuando veo que alguien quiere pisarme los talones, y
le demuestro que aquí estoy por una razón, y si me intentas apuñalar yo lo voy
a evitar, porque este es mi camino y tú acabas de llegar, y ¿Por qué quieres
arrebatarme lo que yo hace tanto tiempo que intento conseguir, qué daño te he hecho?
¡Solo el destino sabe cuál es el final de esta historia y no es dejarme con una
mano delante y otra detrás!
Amo la soledad y amo el silencio, cuando estás en silencio
puedes escuchar lo que nunca dejas que hable, la naturaleza habla a su modo,
los animales hablan su idioma y su forma, las piedras se comunican a su modo, y
los caminos te indican quién ha pisado antes, pero el destino es el único que
sabe cuál será tú final. Reconectarse a veces quiere significar que te
despegues de aquello que te lastima, aunque haga daño a veces es lo necesario
para conectarse con el verdadero ser.
Me iría de aquí y no volvería en meses, me conectaría sin
tener previsto decir nada a dónde voy ni dónde estoy, si practico el desapego
que respeten mi decisión, si el aire lo hace, porque algunos seres no lo
respetan, ¿será porque no fluyen nada de esto? ¿será porque cada vez que quiero
ser yo Isidris me llama y me aferro a su mano, pero siempre consiguen que
vuelva cuando no tenga que hacerlo? ¡Necesito que el silencio me atrape, YA!
Recomendación: Meghan
trainor – me too.
HR.
HERO&Corporation.
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