Sigo estando lejos del silencio y a veces se agradece que me
venga a visitar para aclarar mis dudas que me invaden la mente sin cesar sin
pensar en dejarme descansar. Voy a Barcelona, vuelvo a mi ciudad, me vuelvo a
ir, regreso y así durante el verano que acaba de empezar antes mis pies y mis
ojos no son conscientes que acabo de perder la batalla que tanto Orange me
advertía que iba a pasar. ¿Quieres ganar? ¡Pues aquí lo tienes!
Diría que abandono pero mentiría, solo te dejo volar
tranquilo, sin recelos, sin billete trampa, vuela cuanto quieras, aquí tienes
el semáforo en rojo, y en algún momento tú semáforo volverá a estar en verde, o
quizás en ámbar tanto te gusta jugar que a veces tienes que elegir qué campo
quieres jugar, en vez de estar en medio y jugar un rato con cada equipo. A
veces elegir te hace sabio, si eliges bien, sin que el miedo te invade de
nuevo, pero tú semáforo está en rojo, aquí te detengo, y esta vez estás
obligado a esperar.
Yo no jugaré a dos bandas porque ya me cansé de este juego
de ahora sí, ahora te miro, ahora te persigo, ahora te espero en la farola, y
ahora cuando ella me da señales que existo para ella, me escondo, como si nada
de lo que he hecho, haya ocurrido, pero SI QUE HA OCURRIDO. Tengo ojos igual
que tú, tampoco nuestras mentes están tan separadas como crees, porque lo que
hacías, a mi ese tipo de cortejo, ¡mencanta! Y lo sabes… no es culpa mía que no
me haya lanzado a tiempo, sino todo lo contrario esperaba al momento adecuado,
cuando menos te lo esperes…
Tienes el semáforo en rojo pero hay una cierta personita que
tiene el semáforo en verde y lo está aprovechado. No lo conoces, porque no vive
en la ciudad, así que puedes estar tranquilo si te pensabas que sería alguien
de tus amigos, por dos razones: primera, porque tengo códigos y los respeto,
nunca saldría con el amigo de un amigo; y segunda porque no me interesa aunque
puedo ver los fines de semana como se queda “observando” como la Gogo baila
comiendo palomitas con el resto de los amigos. No importa que mire, pero que lo
haga disimuladamente, solo pido eso.
He intentado hacer cualquier cosa para que me des la
oportunidad, pero veo que tus obligaciones o tus deseos son otros, equivocarse
es de humanos, pero yo sé que me estoy equivocando si me voy, pero creo que ya
me he ido. Sigo sin entender porque todo iba bien hasta que llegó el mes de
Abril, algo te pasó y aprovechaste la oportunidad para evitarme de alguna
forma, cuando yo ni te molestaba. ¿Por qué por ir al súper más de una vez a la
semana? ¿Por qué por intentar conocerte? ¿Por qué por intentar estar cerca e ir
a tú ritmo? O ¿Por qué no me lancé en su momento? Sé que no me lo vas a decir,
ni siquiera vas a hacer el esfuerzo de decirme porque, pero que sepas, que yo
me lo he pasado muy bien durante estos casi ocho meses. Me has ayudado aunque ni
te das cuenta ahora de porque me has ayudado ni en qué, pero yo sé por qué y te
doy las gracias de corazón, aunque no las aceptarás, pero te las doy
igualmente.
Es de humanos terminar este amor que de momento sigue con
sus páginas en blanco, para escribirlo en cuanto se pueda escribir, ahora sé
qué eres tú, solo dejaremos que el tiempo decida cuándo será el tercer
reencuentro y luego la magia hará el resto. Este semáforo el color no es
definitivo, solo depende del tiempo, ya no es ni de nosotros solo del tiempo
quién decidirá cuándo será, la montaña rusa sigue su curso pero por caminos
distintos. Y el regreso se hará evidente si el tiempo sigue apostando en esta
historia en blanco, que no se ha podido escribir ni media palabra en esta historia,
ya que no se escribe nada hasta que uno de los dos da un paso gigante.
Habré perdido las batallas, y la guerra quizás también, pero
no me voy triste, sino que me voy muy contenta porque al fin y al cabo me has
ayudado a volver a amar la vida, ya que tal y como estaba cuando era la noche
de Halloween, era evidente que no podía estar. Me has ayudado mucho más de lo
que puedes llegar a ser consciente ahora mismo, y no me mires con ojos de
cachorrito cuando nos encontremos entre los pasillos del súper, porque no
quieras separarte o porque me obligas a hacerlo, a mí nadie me obliga a hacer
nada. Pero ahora no será y con el tiempo quién lo sabrá, y quién lo sepa, no
quiero que me lo diga, no quiero tener falsas esperanzas, yo sigo el destino de
mi montaña rusa y si tú montaña rusa vuelve a cruzarse conmigo, veremos ¿Por
qué? El oráculo es el hijo del destino, él sabe más que nosotros, consúltalo si
te apetece, pero yo prefiero no saberlo ahora, solo en su momento.
Por lo tanto acepta estas líneas que son las últimas que te
voy a escribir en mucho tiempo, ha llegado el principio de la pausa, el
principio del silencio, y haciendo esto veo que es lo que deseo. Inicia un
viaje, yo lo he hecho, pero mi viaje no es a ninguna parte sino que es
interior, quiero descubrirme y hace unos días que he empezado y para seguir
tengo que dejarte en pausa durante un tiempo. Espero que respetes mi decisión,
y si nos vemos durante el verano, me alegraré de verte, pero no esperes que
haga algo, porque no lo haré. Disfruta tú verano como quieras, te invito al
silencio y que aceptes qué conlleva hacerlo ¿eres capaz?
E aquí termina temporalmente la historia con Mr Orange,
algunos no lo entenderán, otros se alegrarán porque dirán “está libre la
señorita Hero” quizás lo parezca pero en realidad ya me estoy uniendo a
alguien, lo siento, pero esto es lo que siento en mi corazón. Estoy en pausa,
no quiero más noches locas, no quiero ligar en caso que sea alguien que conozca
de hace tiempo, no acepto más ligues que duren poco, que quede claro, porque
parece que nadie lo entiende, yo no busco algo que dure un segundo, yo quiero recopilar
todos los segundos y complementar una bonita historia de amor.
Sé que ser la Gogó es ir en contra de las noches locas, me
gusta que los chicos guapos noten mi presencia, pero si bailo no es para
trincarme a nadie, si bailo es porque adoro bailar, pero de aquí a que tenga
una noche loca con cada uno de los chicos guapos que entran por la puerta en
Xauxa o dónde sea, no lo pienso hacer, ya llevo un par de meses sin tener
necesidad de hacerlo. Porque esta soy yo, una persona que le gusta bailar y
conocer a personas sin tener intención de tirármelas nada más decirle “hola” la
misma noche que lo conozco. ¡Respétenme por favor! Hace un par de meses que he
cambiado de actitud, y me gusta así.
Se pospone la historia con Mr Orange, pero en su lugar se
viene el Duende Gris, no se olviden de él, porque el juego sigue adelante. Da pereza
volver a cambiar chicos, pero esta es la realidad de la historia
#PapiiencontroaMamii ahora es este #DuendeGristeveoenunplis.
Recomendación: fifht
harmony – work.
HR.
HERO&Corporation.
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