sábado, junio 14, 2014

La Casa de la Playa - 1a Parte

Ian está en el porche de lo que quizás sea nuestro nuevo hogar, es preciosa la casa, está a cinco minutos de la playa, tiene un jardín con piscina que es precioso, pero existe una serie de incoherencias, porque para mí la casa me parece un poco caro, pero claro Ian, mí querido futuro marido quiere que esta casa sea para nosotros.

Ayer por la tarde discutimos durante lo que a mí me pareció más de media hora, estabámos decidiendo qué casa iríamos a ver para decidir definitivamente cuál sería nuestro nuevo hogar. A mí me gustaba uno que hay a diez minutos del centro, porque así no estás escuchando todo el tiempo el ruido del tráfico de la ciudad de Mataró, pero a él le encantó esta casa, igual que a mí, pero la casa que había escogido o que me parecía mejor de precio, tiene unos noventa metros cuadrados menos y es evidente que tiene una rebaja de dos cientos cincuenta euros, pero no es tan cara.

Al mismo tiempo, el dinero no es nuestro problema, ambos tenemos un buen trabajo, Ian es ingeniero industrial y yo soy doctora en el Hospital de Barcelona, porque yo nací y me crié allí, pero ahora que vamos a vivir en Mataró, ya he pedido el traslado al hospital más cercano.

- ¿Qué te parece, mí vida?- interrumpe mis pensamientos Ian cuando me coge de la cintura y me hace un beso en la mejilla.

- ¡Es muy bonita! Pero...- él no me deja terminar...

- ¡Lucía ya lo hemos hablado! Esta es la casa de nuestros sueños, y por el dinero no te preocupes, ¡No entiendo porque te preocupas por esto si los dos tenemos buenos empleos! el dinero es el secundario, nuestra felicidad es lo primero, y lo sabes.- me regaña pero al final le noto el tono cambiado, parece que debo entender sus palabras, pero no lo veo del todo claro.

- ¿Y qué pasa con la otra? Desde allí, también podemos ver el mar, con prismáticos, pero lo podemos ver.- contesto como si quisiera discutir.

- Yo no me conformo solo con mirarlo de lejos, aquí podemos escuchar como las olas salpican en la orilla en un día de tormenta. ¿No te parece relajante?- dice contento susurrándome que me estremezco de sensaciones demasiadas hermosas como para pensar ahora que él tiene razón.

La agente de la imoviliaria nos dirige hacia el jardín de atrás, la piscina es preciosa, y la casa por detrás todavía enamora más que verlo desde fuera y por dentro, tiene cuatro habitaciones, tres baños y un estudio muy grande que seguramente si nos la quedamos será el despacho de Ian. Después de dar una vuelta completa por la casa, de nuevo en la entrada me quedo pensando, y en ese momento recibo una llamada de mí hermana Laura.

- Tengo que contestar es Laura.- informo a todos y afirman con la cabeza mientras me voy hacia el salón principal, es todo tan grande.- ¡Hola Laura! - digo contenta de escucharla.

- ¡Lucía!- su tono parece triste y me preocupa.- ¿Puedes ayudarme en una cosita?- me pregunta.

- Sí, ¿Qué te pasa?- pregunto.

- Nacho se ha enterado de que me han dado la beca,...- empieza a llorar o impide hacerlo, eso me parece a mí.

- ¿Una beca? ¡No lo sabía! Soy tú única hermana, estas cosas debería saberlas, Laura.- digo enojada conmigo misma que le hago pagar a ella sin querer.

- Te lo quería contar la otra noche, pero te quedaste dormida y no quise despertarte. Necesito que vengas a casa, ahora.- me ordena y yo me quedo blanca.

- ¿Ahora?- repito sin querer.

- Si. ¿Dónde estás? ¡Te paso a buscar con el coche de mamá!- dice ansiosa.

- No, no hace falta. Estoy fuera de la ciudad, pero en una media hora estoy en casa, Laura.- le informo y noto un suspiro de insatisfacción, parece que el problema es grave.- Mira, ahora le digo a Ian que me traiga a casa de inmediato y hablamos de aquí a media hora, ¿Vale? Ah, y no llores, que ya verás que todo se va a solucionar.- cuelgo sin dejarle que diga nada más y vuelvo hacia Ian que habla con la agente inmoviliaria.

- ¿Podríamos hacer obras?- pregunta Ian, no me asombra nada, él le gusta cambiarlo todo, y una casa, aún le da más razón.- ¿Pasa algo, amor?- me pregunta, supongo que nota mi cara de preocupación.

Sin dar ninguna explicación más, nos despedimos de la agente y subimos al coche para ir a casa, durante el viaje hablamos de la casa, de mí hermana y de su trabajo... resulta fascinante saber que tú futuro marido tiene un trabajo bastante entretenido y que pronto yo voy a formar parte de ella. Finalmente llegamos a casa, pero ha empezado a llover nada más pasar el Recinto del Forum, yo vivo muy cerca a la plaza Tetúan. Bajo del coche y me dispongo a correr hacia el portal, Ian busca aparcamiento mientras yo sin tener tiempo de buscar las llaves llamo al timbre y me contesta Laura.

- Soy yo, tú hermana.- digo, no se me oye muy bien debido al temporal, pero abre la puerta.


HR.

HERO&Corporation.

Sí te gusta esta historia comenta o compartelo con tus amigos, escribiré más partes enseguida que pueda. Un beso a mis fans.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ser Sociable Por Naturaleza...

  Dicen que el hombre es social por naturaleza, últimamente no estoy de acuerdo con esta frase. Necesitamos las relaciones sociales para c...