¡Ay la vida! Te pone en tantas situaciones dificiles, que a veces pensar que nuestra vida es desgraciada, nos lo creemos que si alguien nos dice que la vida que tenemos es mejor que la suya, cuando la situación que nos toca vivir nos invade todos los sentidos y dejamos de "respirar" mentalmente hablando. No vemos qué salida es la mejor, y la salida que agarramos es la peor o no es la adecuada, y luego es cuando se pierde una batalla que quizás podría terminar bien.
Cuando solo piensas en el problema que te hacecha todo el tiempo, es permitir que la soledad y las malas influencias penetren tú cabeza y actues según "ellos" quieren que actues y no por lo que tú mismo decidas actuar, y es cuando la situación se vuelve el doble de dificil. Pensar que nada merecemos tenerlo, es la peor decisión de tú vida, sea larga o corta, cuando te ocurra debes pensar la otras alternativas, analizar lo que sientes, lo que piensas y lo que te gustaría que hubiera pasado. Debes saber que tarde o temprano llega la decisión final, la decisión correcta, y sabes ¿por qué lo es? Porque cuando te lo planteas tú corazón está de tú parte, y hagas lo que hagas, pase lo que pase, te sentirás bien, aunque te sientas en un principio mal, sabrás por tú corazón que solo es temporal, que el dolor tarde o temprano decide marcharse y no volver por un tiempo muy lejano.
¡Tic-Tac! ¡Tic-Tac! ¡Tic-Tac! El reloj de tú vida sigue adelante, el tiempo se oscurece por momentos pero cada momento de oscuridad tienes dos instantes de luz que te están esperando, cuando cruces el umbral que te lastima poco a poco tú corazón y tú vida hermosa. Cuando se está en problemas, nos olvidamos de qué nos mantiene fuertes, de qué es lo que realmente merece la pena luchar, yo debo reconocer que lo único que me ha permitido seguir adelante es el Sol, sé que puede sonar a una tontería, lo cierto es que lo es, pero para mí la importancia del Sol es imprecindible, como si fuera una lagartija buscando su momento para calentar la sangre. El Sol me da las fuerzas necesarias para ver lo que tengo delante de mí, ¿Y tú lo tienes? ¡Búscalo!
La vida solo está protagonizada por tí mismo, no tienes ningún suplente que pueda vivir por tí las escenas de acción, amor o desamor, eres tú quién debe pasar por ese calvario, dónde siempre tiene oculto una moraleja que debemos aprender. Pasito a pasito llevamos a nuestra espalda las tres cosas imprecindibles, la esperanza, la serenidad y la paciencia, con esta ecuación la vida se resuelve y los problemas se disipan pero con pequeños pasos, como si fueras una hormiga trabajadora, que carga de un lado para el otro la comida, la lleva al hormiguero y luego, vuelve allí a fuera en busca de más comida, arriesgándose a todos los peligros, para vivir lo que el presente le tiene preparado, y si hay que luchar, se lucha hasta morir y sin rendirse jamás.
Todos somos fenómenos, seamos lo que seamos, todos lo somos, nos empeñamos en ser mejor que el otro, cuando no somos ni mejor ni peor, somos de la misma especie, las hormigas tienen su jerarquía ya montada, pero todas trabajan para la colonia, ninguna va en solitario, porque moriría, ¿Y de verdad queréis terminar solos? ¡Yo no! Por eso lo peor que podemos hacer es, intentar destacar en el otro compañero, que inició el viaje de su vida, diciéndole que él no podrá ser como tú, porque tú te sentirías menos valorados, cuando todos tenemos la misma nota, el zero. Todos somos el zero, y no quiero decir que no servimos para nada, sino que el zero, representa un círculo cerrado, sin ninguna escapatoria, y eso ¿Cómo se entiende? Pues muy fácil, la línia de ese círculo imaginense que somos cada uno de nosotros, unidos por las manos, un lazo inrompible que nos mantiene unidos para siempre.
Pero a veces no nos sentimos unidos, porque nuestros propios defectos que nos juzgamos entre nosotros, parece que hace romper la harmonía del zero, y todo se vaya a la mierda. ¿Porque no podemos colaborar para reconstruir el círculo y sentirnos bien en harmonía? ¡Algunos ya empezaron! ¿Porque te resistes? ¡Es peor! Llevamos demasiado tiempo peleanos con todo el mundo ¿Y no se consigue nada al respecto sino que se empeoran las cosas? ¿Qué te cuesta aceptar esa mano para aferrarte a ella y no juzgarla? ¡Yo lo he hecho siempre, y a veces la traición une más que lo contrario!
HR
HERO&Corporation
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