Los hijos de Elvira

Después de dos días, Elvira se mudó a su nuevo hogar la casa de los Lápida, Homero su marido ha heretado la casa de su infancia, ya que hace tres años que murió su padre y ocho años su madre. Las cosas siguieron bien, hasta que Alejandro celebró sus 11 años en la fiesta que le prepararon, Casandra tenía 17 años y llegó a la fiesta con su actual novio.

Llaman al timbre y la ama de llaves llamada Marta abre la puerta.
CASANDRA: Hola Marta, siento llegar tarde, es que nos hemos retrasado un poco. Te presento a mi novio, Juan Tenorio. Juan esta es la ama de llaves, Marta. A parte que es amiga de la familia.
JUAN: Mucho gusto, Marta.
MARTA: lo mismo digo, señor Tenorio. Señorita Casandra, la fiesta de su hermano acaba de empezar, su padre se encuentra en el jardín y su madre está en el comedor hablando con su amiga Nina Caliente.
CASANDRA: Muchas gracias, Marta. (camina hacia el comedor pasando por el salón la mano derecha toca la mano de Juan) Te voy a presentar a mi madre, mi amor. (sonríe. Entra en el comedor, Juan se queda en la puerta ya que Elvira lo había visto y se sorprende) ¿Te pasa algo?
JUAN: ¡Ah,... me puedes hacer un favor!
CASANDRA: Claro, dime.
JUAN: ¿Me traes algo de beber? Yo te espero aquí.
CASANDRA: De acuerdo, pero antes quiero presentarte a mi madre, ven. (Se acerca a ella) Mamá, te quiero presentar a mi novio Juan Tenorio.
ELVIRA: (Sigue mirandole a los ojos sorprendida, después de once años otra vez se ven las caras, él no ha canviado demasiado) Hola, soy Elvira (Extiende la mano derecha para saludar)
JUAN: Hola, señora Lápida soy Juan. Encantado de conocerla. (responde al saludo de la mano). Casandra,¿Me haces el favor ahora?
CASANDRA: Si, ahora vengo. (abandona la sala por la puerta que tiene a su izquierda que es la cocina)
Se quedan a hablar Elvira y Juan, Nina decide ir a ver a Alejandro para darle su regalo de cumpleaños. Al final se quedan solos.
JUAN: Que guapa estas, no has cambiado demasiado des de la última vez que nos vimos en... mi trabajo. ¿Cuantos años han pasado?
ELVIRA: ¡No me vengas con piropos ahora, Juan! ¿Qué haces siendo la novia de mi hija?
JUAN: Sabia que reaccionarías de esta forma,... yo he cambiado bastante. Ya no hago lo mismo que antes, ahora que tengo 29 años, he asentado la cabeza con tu hija. Me he enamorado de ella.
ELVIRA: ¿Cómo? ¡No te creo! Sé lo que pretendes con esa sonrisa encantadora y esos pelos tan revoloteados que llevas. ¡No, mi hija no caerá en tus brazos, no porque le voy a contar como eres!
JUAN: ¿Qué? ¡No! Y que pasa con el secreto que pasó entre nosotros, ¿Lo saben?
ELVIRA: Todavía no, y es mejor olvidarlo, pero Casandra me guardará el secreto. Confío en ella.
JUAN: Hagas lo que hagas, yo voy a contarle a tu marido lo que pasó.
ELVIRA: ¿No serás capaz?
Entra Casandra con un vaso de agua en la mano, le da a Juan y él bebe, luego Elvira se va sin decir nada prefiere que sea a solas.

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